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Atenas. El gobierno griego anunció este miércoles que cerrará sus tres campamentos de inmigrantes más superpoblados e insalubres y los reemplazará por estructuras cerradas, triplicando así la capacidad de acogida en las islas egeas de Lesbos, Samos y Chios.
"Descongestionar las islas es la prioridad en este momento", declaró el coordinador especial del gobierno para las migraciones, Alkiviadis Stefanis, en una conferencia de prensa.
Cuatro años después del pico de la crisis migratoria en el 2015, Grecia ha vuelto este año a ser la principal puerta de entrada para los solicitantes de asilo en Europa.
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Cerca de 37.000 personas se encuentran actualmente en los campamentos de Lesbos, Samos, Chios, Leros y Kos, con una capacidad teórica de solo 6.200 refugiados, según las últimas cifras del gobierno.
Los más afectados por la llegada constante de nuevos migrantes, los campamentos de Lesbos, Samos y Chios, no dejan de extenderse por las colinas circundantes, albergando, en condiciones miserables –que el consejo de Europa denuncia regularmente–, más de 27.000 migrantes.
Estos tres campamentos se cerrarán en una fecha no especificada. Para reemplazarlos, se construirán centros de retención de 5.000 plazas cada uno en estas tres islas cercanas a Turquía, anunció Alkiviadis Stefanis.
En lugar de que se les permita entrar y salir libremente de las islas, los solicitantes de asilo serán encerrados en ellos hasta que puedan ser identificados para estudiar su situación y decidir su traslado o regreso a Turquía, añadió el coordinador del gobierno.
En espera de una decisión, serán alojados en contenedores, con acceso a comedores, escuelas y lugares de culto. Los dos campamentos de Kos y Leros, cuyas condiciones son menos dramáticas, serán renovados y ampliados.
El gobierno griego de Kyriakos Mitsotakis comenzó a trasladar a cientos de solicitantes de asilo de las islas egeas al continente, con el objetivo de reubicar a 20.000 de aquí a finales de 2019. Alrededor de 15.000 personas serán alojadas en campamentos y 5.000 en hoteles, dijo Stefanis.
"Estas acciones tienen por objeto demostrar nuestra determinación de hacer frente a la crisis de los migrantes y los refugiados", declaró el responsable griego.
Fronteras ‘herméticas’
Además, unos 800 nuevos guardacostas serán contratados en las islas egeas y otros 400 en la frontera terrestre con Turquía, con el fin de hacer "herméticas" las fronteras griegas, destacó Stefanis. Por otra parte, se establecerán nuevos criterios para autorizar a las oenegés a trabajar en Grecia, añadió Stefanis, también viceministro de Defensa.
Además, anunció que se liberará un fondo de 50 millones de euros para realizar trabajos en los municipios que acepten acoger a migrantes.
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Los habitantes del continente se están quejando. Se produjeron varias manifestaciones en el norte del país, donde se trasladó a solicitantes de asilo. Según la Organización Internacional para las Migraciones, 22.000 migrantes viven actualmente en campamentos del continente, que se acercan o superan su capacidad.
Cientos de exiliados siguen llegando diariamente a Grecia. El Ministerio de Protección Ciudadana anunció que 40.000 personas han llegado al país en los últimos cuatro meses.
