Ciudad de Guatemala. AFP , AP y EFE. Un juez abrió este martes un proceso penal y dictó prisión preventiva contra el expresidente guatemalteco Otto Pérez Molina, al vincularlo con un caso de defraudación fiscal que condujo a su renuncia el 2 de setiembre, tras semanas de intensas protestas callejeras.
El juez Miguel Ángel Gálvez, titular del Juzgado de Mayor Riesgo B, a cargo del caso, ordenó que Pérez Molina sea procesado por los delitos de asociación ilícita, defraudación aduanera y cohecho pasivo.
Gálvez dio a conocer su decisión luego de una extensa presentación de los argumentos que recibió de la Fiscalía y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) , que en su criterio vinculan a Pérez con una red que cobraba sobornos para evadir impuestos aduaneros.
Posteriormente, ordenó remitir al exmandatario a prisión preventiva, por considerar que existe riesgo de que obstaculice la investigación en su contra.
El expresidente permanece recluido desde el pasado jueves, un día después de que renunció a la Presidencia, en el cuartel militar de Matamoros, en la capital.
Pérez, militar retirado de 64 años, llegó a la audiencia en traje formal oscuro y se veía cansado.
Gálvez aseguró que la intención de la red delictiva era tomar control de todas las aduanas guatemaltecas por medio de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) , el ente encargado de la recaudación de tributos, para alterar las declaraciones y obtener un porcentaje de la recaudación.
El juez explicó que su decisión concede a la Fiscalía tres meses para investigar y fundamentar la demanda antes de llevar al exgobernante a juicio oral y público.
Rechazo. Por su parte, Pérez Molina dijo estar “frustrado” después de conocer la decisión del juez.
En declaraciones a los periodistas tras finalizar la audiencia judicial, el exmandatario mostró su rechazo a la decisión de Gálvez, que lo mantendrá en prisión hasta finales de diciembre.
Pérez Molina afirmó que no entiende por qué ha sido ligado a proceso y es enviado a prisión preventiva, ya que, sostuvo, no hay argumentos ni “pruebas sólidas” en su contra, solo “pláticas” y referencias de terceros.
“No he evadido nada. He dado la cara en todo. No he participado en ninguna estructura criminal. Estoy tranquilo. Confío en que esto tiene que aclararse”, expresó.
El exjefe de Estado criticó además el papel de Cicig en el proceso en su contra y en la Justicia porque, dijo, responde a intereses internacionales, que no precisó.
En una votación histórica, el Congreso de Guatemala decidió el martes de la semana pasada r etirar la inmunidad al expresidente para permitir que sea investigado como cualquier ciudadano.
Poco después de conocerse la decisión, aprobada por unanimidad por los 132 legisladores presentes en la cámara, un juez le prohibió salir del país .
La fiscala general, Thelma Aldana, explicó que se trataba de una medida preventiva para evitar la fuga del exmandatario.