Washington. La oposición republicana asume este martes el control de la Cámara de Representantes de Estados Unidos decidida a enfrentar al presidente demócrata Joe Biden, pero antes debe resolver disensiones en sus propias filas.
Los nuevos representantes, electos en las legislativas de noviembre, se reúnen para jurar sus cargos de dos años.
Por primera vez en su mandato, Biden lidiará con un Parlamento dividido: su partido demócrata mantuvo el control del Senado, pero la oposición republicana obtuvo una mayoría muy ajustada en la Cámara de Representantes.
“Los estadounidenses están preparados para el cambio tras dos años calamitosos bajo el liderazgo del partido Demócrata”, afirmaron los diputados republicanos, que prometieron investigaciones sobre la gestión de la pandemia por parte Biden o la retirada estadounidense de Afganistán.
Pero antes de esas batallas tienen que ponerse de acuerdo para elegir al Presidente de la Cámara de Representantes, lo cual no es fácil, debido a las divisiones del partido.
McCarthy debilitado
La elección del presidente de la Cámara, la tercera figura más importante de la política estadounidense tras el presidente y el vicepresidente, se decidirá este martes por mayoría simple.
Siete años después de su primera tentativa, Kevin McCarthy, que lidera la bancada republicana en la cámara baja desde 2014, espera tomarse la revancha.
Pero está debilitado por los malos resultados de los republicanos en las elecciones de noviembre, ya que la "ola roja" pronosticada por los conservadores no se concretó.
El partido Republicano tiene 222 escaños y McCarthy necesita 218 votos para ser electo presidente.
Sin embargo, un pequeño grupo de legisladores muy cercanos a Donald Trump dijeron que pondrán condiciones antes de apoyarlo. Lo critican por no defender suficientemente al expresidente.
Tres ya dijeron que votarán en contra. “Kevin no cree en nada, no tiene ideología”, dijo el representante Matt Gaetz.
McCarthy parece dispuesto a dar garantías a los rebeldes pero no puede disgustar a los republicanos moderados.
Aunque su margen de maniobra es mínimo no tiene ningún rival fuerte a la vista. Se menciona como posible alternativa a Steve Scalise pero no parece tener muchas chances.
Contra Biden
Con los republicanos controlando la Cámara de Representantes, Biden y los demócratas perdieron poder para aprobar nuevas iniciativas. Los republicanos tienen el mismo problema en el Senado donde los demócratas son mayoría.
¿Se atrincherarán en una oposición sistemática? Para ello tendrían que actuar como bloque unido. En la votación presupuestal previa a la Navidad, republicanos votaron junto a demócratas y evitaron el cierre del gobierno federal (shutdown).
Por tanto, la elección del presidente de la Cámara también servirá para medir la capacidad de atacar a Biden.
Enfrentar una Cámara hostil podría darle una ventaja, si confirma su intención de presentarse a la reelección en 2024, una decisión que se espera que anuncie a principios de este año.
En caso de parálisis legislativa, sin duda culpará del estancamiento a los republicanos con la esperanza de convertir la situación en una ventaja para él.