Ciudad de México. México destacó este miércoles una disminución del flujo de migrantes irregulares que intentan cruzar por su frontera hacia Estados Unidos, así como un aumento en la incautación de armas introducidas ilegalmente desde ese país, después de una reunión entre altos funcionarios de ambas naciones.
El declive de esa migración ocurre tras la expiración el pasado 11 de mayo de la aplicación del Título 42, un decreto de Washington que permitía la detención y expulsión inmediata de los indocumentados, según resaltó la canciller mexicana, Alicia Bárcena.
“Los encuentros irregulares (de migrantes con patrullas estadounidenses) en la frontera entre mayo y junio disminuyeron en un 50%. Esto es muy importante”, dijo la diplomática, al destacar que este indicador alcanzó su nivel más bajo desde febrero de 2021, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense (CBP por su siglas en inglés).
Bárcena advirtió que, en contraste, la migración irregular de familias aumentó un 36% entre junio y julio, según la misma fuente.
La canciller también destacó los resultados del programa de “permisos humanitarios” y de la aplicación para teléfonos móviles CBP One, dos herramientas negociadas con Estados Unidos para facilitar el ingreso regular de migrantes de diversas nacionalidades.
Bárcena precisó que 166,000 migrantes llegaron a Estados Unidos mediante esos permisos y otros 106,000 lo hicieron usando la aplicación.
“Son 272,000 personas (...) De verdad es un gran logro del acuerdo bicentenario entre México y Estados Unidos”, afirmó la canciller, refiriéndose al mecanismo de cooperación en seguridad implementado en diciembre del 2021.
Sobre la tensión suscitada con Texas, donde el gobernador Greg Abbott instaló boyas para impedir el paso de migrantes en un tramo de 305 metros del fronterizo Río Grande, Bárcena informó que la mayor parte de dicha barrera (230 metros) está en territorio mexicano.
“Es un espacio pequeño, pero el principio es lo que nosotros queremos destacar”, dijo la canciller, quien informó que se enviaron dos notas diplomáticas que especifican los acuerdos fronterizos que se están violando.
El martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó la colocación de las boyas como una “provocación” que viola la soberanía mexicana.
En cuanto al tráfico de armas, uno de los principales reclamos contra Washington, Bárcena destacó el “esfuerzo enorme” de México para decomisar 70,571 armas en comparación con las 2,955 incautadas por Estados Unidos.
Al respecto, planteó avanzar “en mayor reciprocidad para incrementar el decomiso de armas” ilegales, un flujo que alcanza las 200,000 por año, según cifras oficiales citadas por Bárcena.
LEA MÁS: Washington y Texas discuten sobre las boyas antimigrantes
La reunión binacional, centrada en migración, tráfico de fentanilo y armas, se realizó el lunes, seguida de otro encuentro el martes, en el que también participó Canadá, enfocado en drogas sintéticas.