Washington. AP. En una firme defensa de la privacidad en la era digital, la Corte Suprema de Estados Unidos falló ayer, por unanimidad, que en general la Policía no puede revisar los teléfonos celulares de las personas que arresta sin conseguir primero una orden judicial.
Los celulares son artefactos poderosos que la Policía puede hallar en un arrestado, dijo el presidente del tribunal, John Roberts. Debido a que contienen tanta información, las autoridades deben conseguir esa orden antes de revisarlos, precisó.
“Los teléfonos celulares no son una conveniencia tecnológica más”, afirmó. “Con todo lo que contienen y que pueden revelar, representan para muchos estadounidenses la privacidad de la vida”.
El mensaje a la Policía sobre lo que debe hacer antes de revisar el contenido de un celular después de un arresto es sencillo. “Consiga una orden de allanamiento”, puntualizó Roberts.
El juez admitió que la prohibición de revisar los teléfonos podría afectar a la Policía, pero agregó que “la privacidad tiene su precio”.
Una excepción al requisito de la orden es en caso de que los policías teman razonablemente por su seguridad o por la vida de terceros.
La Corte decidió no extender fallos anteriores que permitían a la Policía a vaciar los bolsillos de un sospechoso y examinar todo lo que encontrasen para garantizar la seguridad de los agentes e impedir la destrucción de pruebas.
El gobierno de Barack Obama y el estado de California, en defensa de la inspección de los celulares, dijeron que estos aparatos no deberían tener mayor protección de revisión que cualquier otra cosa que halle la Policía.
Pero los acusados en esos casos, respaldados por defensores de los derechos civiles, bibliotecarios y grupos periodísticos, argumentaron que los celulares, especialmente los teléfonos inteligente ( smartphones ), son computadoras cada vez más poderosas que pueden contener una cantidad de información personal delicada.
“Al reconocer que la revolución digital ha transformado nuestras expectativas de privacidad, la decisión es en sí revolucionaria y ayudará a proteger los derechos a la privacidad de todos los estadounidenses”, manifestó el director legal de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), Steven Shapiro.