La Paz. Las elecciones generales del 20 octubre en Bolivia se encaminan a una segunda vuelta entre el presidente Evo Morales, quien busca su cuarto mandato consecutivo, y el opositor Carlos Mesa, según un sondeo de intención de voto publicado este domingo por un medio local.
Morales, encabeza la intención de voto con 35%, seguido por Mesa, con 27%, de acuerdo con la encuesta de la empresa Mercados y Muestras, publicada por el diario Página Siete, que establece un 24% de indecisos.
El tercero en competencia, el también opositor Oscar Ortiz, obtendría el 11% de apoyo electoral. Los demás candidatos opositores están en torno al 2% o menos.
De acuerdo con la ley electoral boliviana, el balotaje tendría lugar si el candidato ganador no logra el 50% más uno de los votos válidos o, si teniendo más del 40% de los votos válidos, obtiene una ventaja de al menos diez puntos porcentuales sobre su inmediato seguidor. La segunda vuelta tendría lugar el 15 de diciembre.
El sondeo indica que, en un eventual balotaje, el opositor Mesa vencería a Morales por un punto. Mesa se llevaría el 44% y Morales el 43%, con un segmento de 13% de indecidos.
La preferencia por Morales, en el poder desde el 2006, ha subido desde el 32% en enero pasado al 35% en julio, mientras que el respaldo a Mesa bajó en ese mismo período del 32% al 27%, según la encuesta.
En eventual segunda vuelta, Mesa le ganaría a Morales por un punto https://t.co/kdp9uEK4i7 pic.twitter.com/H1iAsBQEL1
— Página Siete (@pagina_siete) August 4, 2019
Los resultados mencionados se asemejan al sondeo precedente más inmediato, publicado por la encuestadora Ciesmori el 22 de julio, aunque entonces la diferencia se ampliaba a once puntos.
En esa oportunidad, Morales lideraba la intención de voto con un 37% de apoyo electoral, sustentado sobre todo por las zonas rurales y ciudades intermedias. Mesa registraba el 26% de preferencia con un respaldo mayoritariamente urbano.
A menos de tres meses de los comicios bolivianos, la campaña electoral se ha intensificado con múltiples denuncias en el marco de una "guerra sucia" orientada sobre todo a desacreditar al opositor Carlos Mesa.
La oposición cuestiona la candidatura de Morales al considerar que no respeta el resultado del referendo de febrero del 2016 que rechazó su nueva postulación.
Sin embargo, el oficialismo logró en noviembre del 2017 que el Tribunal Constitucional declarase que volver a presentarse era un derecho humano de Morales.