Roma. El presidente italiano tomó juramento el viernes al primer gobierno populista de Europa occidental, una mezcla de ministros derechistas y antisistema que prometen un programa de “ Italia primero”, para alarma del establishment europeo.
Los políticos euroescépticos del continente aplaudieron la juramentación del nuevo gobierno de coalición integrado por el Movimiento 5 Estrellas (m5E, antisistema) y la Liga (ultraderechista).
El índice de la bolsa de Milán subió el viernes luego de que los populistas italianos pusieron fin a tres meses de estancamiento y formaron el primer gobierno populista del país.
El presidente Sergio Mattarella, quien negoció durante tres meses de impasse político hasta encontrar un gobierno viable, presidió la ceremonia del viernes en los salones dorados del palacio del Quirinale.
Dieciocho ministros -cinco de ellos mujeres- prestaron juramento de respetar la Constitución y trabajar exclusivamente en bien de los intereses nacionales.
El crucial Ministerio de Economía fue para un economista tradicional cercano al centroderechista Forza Italia del expremier Silvio Berlusconi.
Mattarella había vetado al candidato del M5E propuesto por sus posiciones euroescépticas.
La nueva ministra de Administración Pública es la abogada centroderechista Giulia Bongiorno, conocida por su defensa del ex primer ministro Giulio Andreotti cuando fue acusado de complicidad con la mafia.
La ceremonia puso fin a una semana de turbulencia política y económica al acordar con el presidente que no designarán a un ministro de economía euroescéptico.
El sábado se celebra el Día de la República, la fecha en 1946 cuando Italia abolió la monarquía y creó la Primera República.
El veloz ascenso de l Movimiento 5 Estrellas y su alianza con la Liga, un partido antiinmigrante, han sido bautizados como el nacimiento de la Tercera República, después de la derrota del orden político de posguerra en la elección del 4 de marzo.
El 'abogado defensor'
El primer ministro Giuseppe Conte, quien había prometido ser el “ abogado defensor del pueblo italiano ” en su primer intento fallido de formar gobierno, tuvo un anticipo de lo que muchos italianos esperan de él al iniciar labores.
Al salir del Parlamento, se encontró con un grupo de trabajadores recientemente despedidos que reclaman trabajo. “Tienen que confiar en todos nosotros”, les dijo después de escuchar sus reclamos.
La bolsa de Milán subió 2,5% por la mañana y las tasas de interés bajaban después de un fuerte aumento durante la semana, cuando parecía que Italia iba a nuevas elecciones que podían transformarse en un referendo sobre la pertenencia a la zona del euro.
Los populistas y derechistas de Europa consideraron la noticia una bofetada a Bruselas. La dirigente ultraderechista francesa Marine Le Pen tuiteó, “¡Bravo la coalición!” “Es una victoria de la democracia sobre la intimidación y las amenazas de la Unión Europea , dijo añadió. “Nada impedirá el regreso del pueblo al escenario de la historia”.
Bravo à la coalition de @matteosalvinimi et à la Ligue qui forment finalement le nouveau gouvernement italien. C’est une victoire de la démocratie sur les intimidations et les menaces de l’Union européenne.
— Marine Le Pen (@MLP_officiel) June 1, 2018
Rien n’empêchera le retour des peuples sur la scène de l’Histoire ! MLP
Nigel Farage, exdirigente del partido UKIP que cumplió un papel crucial en la campaña por el brexit, dijo en un mensaje por video: “Mucha suerte a los dos partidos, a los dos líderes, Una cosa: sean fuertes, los matones los perseguirán”.
Fue una alusión a los funcionarios de la Unión Europea en Bruselas que han expresado su preocupación -incluso en términos poco diplomáticos- por la orientación euroescéptica de la tercera economía europea.
“Estoy profundamente enamorado de la bella Italia”, dijo el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en una conferencia el jueves.
Rechazó que los males de Italia sean culpa de la UE. “Los italianos deben ocuparse de las regiones pobres de Italia. Eso significa más trabajo, menos corrupción y seriedad. Les ayudaremos, como siempre hemos hecho, pero no entren en este juego de cargar de responsabilidad a la Unión Europea”.