La OEA convocó para el 10 de enero una sesión extraordinaria para abordar la situación en Venezuela, coincidiendo con el inicio del segundo mandato de Maduro tras unos comicios desconocidos por varios países latinoamericanos, Estados Unidos y la Unión Europea.
Este viernes el Grupo de Lima se reunió en la capital peruana y exhortó a Maduro a no asumir un nuevo mandato y transferir provisionalmente el poder a la Asamblea Nacional hasta que se realicen elecciones, en una declaración de la cual se restó México.
El Grupo de Lima fue creado en el 2017, año de protestas contra Maduro que dejaron unos 125 muertos en Venezuela, y está integrado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Guyana y Santa Lucía.
Venezuela inició en abril del 2017 el procedimiento para retirarse de la OEA, que debería concretarse en abril del 2019, después de haber sido amenazada en varias ocasiones con la expulsión aunque sin que se haya conseguido nunca la mayoría necesaria de dos tercios para concretar esa medida.
Venezuela está sumida en una grave crisis política y económica que ha obligado a 2,3 millones de personas a abandonar el país desde el 2015, según la ONU.
La crisis ha provocado escasez de alimentos y medicinas y, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la inflación en el 2019 alcanzará 10.000.000%.