Estrasburgo, Francia. El socialdemócrata italiano David Sassoli se convirtió este miércoles en el nuevo presidente de la Eurocámara, última pieza del ajedrez de los altos cargos en la Unión Europea (UE) tras el acuerdo alcanzado la víspera por los dirigentes.
“Debemos tener el coraje de relanzar nuestro proyecto de integración, debemos desarrollar nuestra Unión” para que responda “a las exigencias de los ciudadanos”, declaró Sassoli, de 63 años y periodistael , tras su elección en la segunda ronda de votaciones.
Este eurodiputado desde 2009 y vicepresidente del Parlamento Europeo desde el 2014, nacido en Florencia en 1956, se impuso con 345 votos a la alemana ecologista Ska Keller (119), al conservador euroescéptico checo Jan Zahradil (160) y a la española de izquierda radical Sira Rego (43).
Aunque el Partido Popular Europeo (PPE, derecha) fue con 182 escaños la primera fuerza en las elecciones europeas de mayo, no presentó un candidato a suceder al italiano Antonio Tajani, en virtud del pacto de los mandatarios.
“Después de dos años y medio de presidencia del PPE, ahora corresponde a los socialistas presentar un candidato. Estamos dispuestos a apoyarlo”, anticipó la víspera su jefe de filas, Manfred Weber, candidato fallido a dirigir la Comisión Europea.
La atribución de la presidencia de la Eurocámara a los socialdemócratas, segunda fuerza con 154 escaños, se inscribe en el acuerdo que la víspera otorgó la presidencia de la Comisión Europea a la alemana Úrusula Von der Leyen (PPE).
Tradicionalmente, socialdemócratas y la formación de derecha se han repartido los altos cargos, pero las últimas elecciones europeas las despojaron de su mayoría en el Parlamento Europeo, que ahora tienen que alcanzar con liberales o verdes.
La inclusión de los liberales, tercera fuerza con 108 bancas, en la ecuación para forjar una mayoría proeuropea complicó la discusión de altos cargos. Finalmente, obtuvieron la presidencia del Consejo Europeo para el belga Charles Michel.
Aunque los socialdemócratas obtuvieron la presidencia de la Eurocámara, así como la diplomacia europea para el español Josep Borrell, su líder parlamentaria, Iratxe García, criticó un plan “decepcionante” de reparto de altos cargos.
Su malestar se centró en que los mandatarios no escogieron para la Comisión a ninguno de los candidatos que lideraron a las familias políticas durante las elecciones a la Eurocámara de mayo, una exigencia del anterior parlamento.
La ecologista Keller, durante la defensa ante el hemiciclo de su candidatura, advirtió de que “la presidencia de la Eurocámara no debe ser una ‘moneda de cambio’ en la negociación de los puestos de responsabilidad europeos”.
"Yo no soy el hombre del Consejo, soy el hombre del Parlamento", se defendió en rueda de prensa Sassoli, quien incluyó la migración entre sus prioridades y urgió a los países a finalizar la reforma del asilo, su "deber moral".
El nombre del búlgaro socialdemócrata Serguéi Stanishev sonaba en Bruselas para liderar el Parlamento Europeo, para así dar un alto cargo a un país del este del bloque, pero todos serán de Europa occidental o central.
Sassoli, quien presidirá la Eurocámara en la primera mitad de la legislatura hasta enero del 2022, deberá enfrentar un hemiciclo con una mayor presencia de euroescépticos y la eventual salida, a fines de octubre, de los diputados británicos.
El presidente saliente, Antonio Tajani, quien desde la cima de la Eurocámara fue un firme defensor de la oposición venezolana a la que se le otorgó enel 2017 el premio Sájarov, deseó “buen trabajo por el futuro de Europa” a su sucesor.
El 15 de julio, los eurodiputados deberán dar su visto bueno al nombramiento al frente de la Comisión Europea a partir del 1.° de noviembre de Úrsula Von der Leyen, quien debe reunirse con las filas del PPE en la Eurocámara este miércoles.