Berlín. Los socialdemócratas alemanes, reunidos en congreso, aprobaron este jueves abrir negociaciones con los conservadores de la canciller Ángela Merkel para explorar la posibilidad de una coalición de gobierno, aunque con condiciones drásticas.
Los 600 delegados al congreso aprobaron la moción para esas conversaciones “abiertas” que podrían desembocar en una coalición de gobierno, o en el simple apoyo a un gobierno minoritario de Merkel, sin integrarlo.
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El presidente del SPD, Martin Schulz, se mostró, al abrir el congreso, partidario de esas negociaciones, aunque con condiciones firmes, en particular respecto a las reformas en Europa.
Schulz se reunirá la semana que viene con Merkel, jefa de la Unión Cristianodemócrata (CDU), y el dirigente del partido bávaro conservador CSU, Horst Seehofer.
“No tenemos que gobernar a cualquier precio. Pero no tenemos tampoco que rehusar a gobernar a cualquier precio” dijo Schulz, expresidente del Parlamento Europeo, ante los delegados, que seguirán reunidos durante tres días en Berlin.
“Lo que es decisivo es que podemos imponer” parte del programa electoral socialdemócrata, destacó Schulz, que se mostró igualmente un partidario resuelto de avanzar en el proyecto europeo.
Schulz, reelegido al frente del SPD, abogó por unos “Estados Unidos de Europa” de aquí a 2025.
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Desde que abandonó la presidencia del Europarlamento, Schulz se había mostrado partidario de una ruptura con la canciller.
Desde las legislativas de setiembre y aún más desde el fracaso de Merkel en formar una coalición con los liberales y los verdes, la socialdemocracia dudaba en reconducir la alianza saliente con la canciller.
El SPD, el partido más viejo de Alemania, está hundido en una crisis de identidad desde los resultados de las legislativas, históricamente bajos.
En las filas del SPD muchos son los que quieren una cura de oposición, en particular entre los jóvenes que rechazan una tercera gran coalición liderada por Merkel, como las de 2005-2009 y 2013-2017.
En el fondo “nadie quiere realmente una nueva ‘gran coalición’”, resumió uno de los cuadros del partido, Johannes Kahrs. “Pero en la situación actual se trata de asumir nuestras responsabilidades, lo que significa que al menos debemos discutir”.
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Según los sondeos, la organización de nuevos comicios sería provechoso únicamente al partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD). Esta formación logró un resultado histórico de 13% en setiembre, atomizando la composición de la cámara de diputados lo que dificulta hallar mayoría.
La formación de un cuarto gobierno dirigido por Ángela Merkel podría tomar meses.
Según una de las figuras del SPD, el alcalde de Hamburgo (norte), Olaf Scholz, el pacto no llegará “antes de la primavera”.
El eventual resultado de negociaciones sería sometido a un voto de los militantes, con resultado incierto.
Según un sondeo del semanario Der Spiegel, 56,5% de los militantes del SPD se pronuncian a favor de apoyar un gobierno minoritario y sólo 27,9% quiere una nueva gran coalición.
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El SPD también fijó los temas que considera esenciales para participar o apoyar un gobierno de Merkel, en primer lugar una gran reforma de la Unión Europea (UE) para que sea más “democrática, solidaria y social”.
El SPD apoya activamente las posiciones del presidente francés Emmanuel Macron que quiere crear un presupuesto de la zona euro. Los conservadores se muestran más dubitativos.
También piden una cobertura médica universal para reducir las desigualdades en el país. El tema migratorio también figura entre los puntos disonantes entre conservadores y socialdemócratas.