Washington. El presidente Donald Trump abogó el sábado por el rápido reemplazo de la fallecida jueza de la Corte Suprema de Justicia, Ruth Bader Ginsburg, un ícono de la izquierda estadounidense, lo cual abrió un potencial campo de disputa en la recta final a las elecciones presidenciales estadounidenses del 3 de noviembre.
Nominar magistrados de la Corte es “la decisión más importante” para la que se elige al presidente, tuiteó Trump este sábado y pidió llenar “sin demora” la vacante dejada por la muerte de esta jurista de 87 años, defensora de la causa de las mujeres, las minorías y el medio ambiente.
.@GOP We were put in this position of power and importance to make decisions for the people who so proudly elected us, the most important of which has long been considered to be the selection of United States Supreme Court Justices. We have this obligation, without delay!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 19, 2020
Trump parece decidido a proceder a una nominación que puede desnivelar en favor de los conservadores la integración de la Corte.
La jueza RBG, como se la conocía, murió el viernes tras un cáncer de páncreas y generó una ola de consternación en el país pero también despertó preocupación entre los demócratas.
A 45 días de las elecciones, el candidato demócrata, Joe Biden, y el expresidente Barack Obama se pusieron en guardia ante Trump, quien intenta la reelección.
“Los electores deben elegir al presidente y el presidente debe proponer un juez al Senado”, dijo Biden quien aventaja a Trump en las encuestas.
Obama instó a Trump a abstenerse de hacer una nominación hasta que los votos estén depositados.
Los nueve miembros de las Suprema Corte de Justicia tienen cargos vitalicios y Trump ya nominó a dos conservadores, por lo cual ese campo cuenta con cinco magistrados.
Lo que está en juego tiene suma relevancia. No solo porque la Corte es clave para dirimir asuntos controversiales como el derecho a portar armas o los derechos de los homosexuales, sino que además puede ser llamada a resolver litigios electorales, como ocurrió en la elección de 2000 finalmente ganada por George W. Bush.
Nombres de Trump
En el papel, nada impide que Trump nomine al relevo de Ginsburg, quien desde hace meses estaba muy delicada de salud. A comienzos de setiembre, Trump ya tenía una lista de 20 nombres para una eventual vacancia en la Corte, entre los cuales se contaban los senadores ultraconservadores Ted Cruz y Tom Cotton.
El jefe de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, dijo el viernes que está dispuesto a echar a andar el proceso de nominación. En circunstancias parecidas, hace cuatro años bloqueó la designación de un juez propuesto por Obama.
Trump dispone de una mayoría republicana de 53 a 47 en el Senado, pero la ecuación es compleja. Varios senadores republicanos moderados podrían no aceptar su propuesta, especialmente aquellos cuya reelección en estados políticamente moderados es muy difícil.
Desde la noche del viernes cuando su anunció su deceso, cientos de personas convergieron ante el edificio de la Corte Suprema para honrar a RBG, nacida en 1933 en una familia judía y muerta el día del Rosh Hashaná, el nuevo año judío.
“Vine porque creo que RBG representa todo por lo cual Estados Unidos debe movilizarse”, expresó Erin Dunn, un estudiante de 19 años.
En la mañana del sábado, numerosas personas se acercaron al edificio de mármol blanco. Entre ellas se contó Kamala Harris, compañera de fórmula de Biden.
“RBG fue para mí una pionera, un ícono, una combatiente. Era una mujer en todo el sentido del término”, manifestó.
Trayectoria destacada
Ruth Bader Ginsburg se ganó un lugar en la historia de la conquista de derechos y de la lucha contra las discriminaciones.
Como abogada obtuvo de la Corte Suprema el desmantelamiento de leyes discriminatorias contra las mujeres. Desde su sillón en el máximo tribunal estadounidense, donde ingresó 27 años atrás a propuesta del presidente Bill Clinton, luchó por la igualdad de las minorías sexuales y otras causas progresistas, como la defensa de los migrantes o la protección del medio ambiente.
Su nombre y su imagen -expresión firme, un collar de encaje sobre su bata negra de magistrada y ojos detrás de unos enormes anteojos-, se convirtieron en objeto de culto de las feministas, tatuados en brazos o impresos en bolsos. Su vida inspiró películas, documentales e incluso libros para niños.
De momento no se conocieron detalles sobre sus exequias.