En medio de la escalada de violencia que azota a Oriente Medio, la organización Hezbolá ha ganado protagonismo por el recrudecimiento de hostilidades con Israel.
Las tensiones entre ambos bandos datan desde hace muchos años. Sin embargo, el conflicto entró en un nuevo capítulo desde el 7 de octubre del 2023, cuando el grupo armado libanés abrió un frente de ataque en la frontera con Israel en apoyo a la ofensiva realizada desde Gaza por milicias del movimiento islamista Hamás.
Desde entonces, Israel intensificó su campaña militar contra este grupo, la cual llegó a su punto más alto en el pasado mes de setiembre cuando la inteligencia de ese país logró causar sensibles bajas a la organización mediante la explosión de bíperes y walkie-talkies que usaban sus miembros como medio de comunicación.
Además, el reciente fallecimiento de Hasán Nasralá, icónico jefe de Hezbolá, provocó una fuerte reacción de su aliado, Irán, que el pasado 1.° de octubre disparó decenas de misiles contra Israel, los cuales fueron interceptados por el sistema de defensa y crisparon los ánimos entre Teherán y Jerusalén.
Pero, ¿qué es Hezbolá y cuál es su papel en este conflicto? Para unos, se trata de una organización terrorista. Otros lo ven como un grupo de resistencia y también hay quienes lo cuestionan por su involucramiento en hechos de corrupción política y por su poder militar independiente del Estado libanés.
Su influencia se extiende más allá de sus fronteras, impulsada por su estrecha alianza con Irán y su participación en diversos conflictos, como la guerra civil siria. Este explicador busca arrojar luz sobre qué es realmente Hezbolá y cómo llegó a ser una de las fuerzas militares no estatales más poderosas del mundo.
¿Qué es Hezbolá?
Hezbolá significa Partido de Dios. La organización es un influyente partido político y grupo armado musulmán chiíta que opera en Líbano. Además de su fuerte presencia en el Parlamento y el Gobierno, controla la fuerza armada más poderosa del país, a la par del Ejército nacional.
Desde su surgimiento, en la década de 1980, está profundamente ligado a la resistencia contra la ocupación israelí y mantiene un importante respaldo militar y financiero de Irán.
Origen y resistencia
El grupo saltó a la escena internacional durante la guerra civil libanesa (1975-1990), cuando comenzó a combatir la ocupación israelí en el sur del país. Este conflicto fue decisivo en la formación de Hezbolá como una fuerza militar significativa, y su apoyo de Irán le permitió mantenerse como figura central en la resistencia.
Fue creado por clérigos en el Líbano en 1982 y fue fundado como grupo insurgente que aglutinaba a musulmanes chiitas entrenados, organizados y fundados por un contingente de la Guardia Revolucionaria iraní.
En el año 2000, cuando las tropas israelíes se retiraron del sur de Líbano, Hezbolá se atribuyó el mérito de dicha retirada en un intento por reforzar su reputación y legitimidad en la región.
En 2006, Hezbolá e Israel protagonizaron una guerra a gran escala que dejó más de 1.000 civiles muertos. A pesar del devastador conflicto, la organización reivindicó la victoria y desde entonces fortaleció su infraestructura militar y aumentó su número de combatientes.
Poder político y militar
A nivel político, Hezbolá participó en las elecciones libanesas desde 1992 y consolidó una base significativa de apoyo popular. Aunque perdió la mayoría parlamentaria en las elecciones de 2022, sigue influyendo en la política a través de ministros en el gobierno interino.
Sin embargo, el grupo es divisivo: mientras muchos libaneses ven a Hezbolá como una fuerza de resistencia y benefactor social, otros lo critican por su participación en la corrupción política y su capacidad militar autónoma.
Desde una perspectiva militar, Hezbolá es una de las organizaciones armadas no estatales más poderosas del mundo, que cuenta con entre 120.000 y 200.000 cohetes y misiles, muchos de ellos suministrados por Irán.
Este arsenal incluye misiles antiaéreos, antibuques y cohetes guiados, lo que le otorga una capacidad militar avanzada en comparación con otros actores no estatales como Hamás en Gaza.
Apoyo social y críticas
Además de su influencia política y militar, Hezbolá estableció una red de instituciones sociales que incluyen hospitales, escuelas y organizaciones benéficas en todo Líbano, lo que ha aumentado su popularidad en las zonas chiítas del país.
No obstante, su fuerte relación con Irán y su implicación en conflictos como la guerra civil siria provocaron tensiones tanto dentro de Líbano como en la región. Además, es catalogado como organización terrorista por varios países occidentales como Estados Unidos, Israel y algunos estados árabes del Golfo. Sin dejar de lado a la Unión Europea.