Escuchar
Un candidato a la Casa Blanca suele elegir a un compañero de fórmula para la vicepresidencia que pueda atraer a nuevos electores o compensar debilidades en imagen o política.
Donald Trump rompió esa tendencia al seleccionar a alguien similar a él: un hombre blanco, conservador y nacido en Ohio, donde el magnate ya tiene todas las posibilidades de ganar. Este candidato es James David Vance, mejor conocido como J. D. Vance.
LEA MÁS: Candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos defienden a Donald Trump y Kamala Harris en debate
Por su parte, Kamala Harris tomó una ruta algo distinta. Su elegido, Tim Walz, es poco conocido fuera de Minnesota. Con 60 años, los mismos que Harris, Walz tiene un historial atípico: experiencia militar, profesor de geografía y entrenador de fútbol americano.
A continuación, presentamos a los candidatos a vicepresidentes para las elecciones de Estados Unidos:
J. D. Vance pasó de crítico a defensor de Donald Trump
Nacido el 2 de agosto de 1984 en Middletown, Ohio, Vance creció en una comunidad afectada por la pobreza y la falta de oportunidades. Su madre, Beverly Vance, ya había tenido a su hermana mayor Lindsay a los 19 años.
Al momento de su nacimiento, el ahora senador recibió el nombre de James Donald Bowman en honor a su padre, Donald Bowman.
Antiguo crítico de Trump y hoy su compañero de fórmula, Vance, de 40 años, es el más joven entre los candidatos a la vicepresidencia. Creció en una región manufacturera en declive, se enlistó en los Marines y luego estudió derecho en Yale.
Trabajó en Silicon Valley y, en 2022, fue elegido senador por Ohio con el apoyo de Trump.
En su juventud, cuando aún no lucía la barba que ahora lleva, Vance fue un crítico severo del magnate neoyorquino, llamándolo “un desastre moral” durante la campaña presidencial de 2016.
Sin embargo, posteriormente eliminó todas sus publicaciones críticas y se alineó. “Era escéptico respecto a Trump en 2016, pero el presidente fue un gran líder y cambió mi opinión”, comentó Vance a Fox News.
LEA MÁS: ¿Podrá J.D. Vance ayudar a ganar a Donald Trump?
Vance se hizo famoso con su libro de memorias “Hillbilly Elegy”, un relato sobre su familia de clase trabajadora de los Apalaches en la región del Cinturón del Óxido. Su perfil tranquiliza a los republicanos más conservadores y puede atraer a los votantes moderados.
En el Senado, se destacó por su oposición a la ayuda a Ucrania, pidiendo que esos fondos se destinen a frenar la inmigración ilegal. Promueve el cierre de fronteras y el aislacionismo. De ascendencia escocesa-irlandesa, está casado con Usha Chilukuri, de origen indio, con quien tiene tres hijos.
El panorama que Vance describe en su autobiografía sirvió para entender el éxito político de Donald Trump. La clase trabajadora empobrecida, protagonista de su libro, coincide con el público meta de Trump.
Tim Walz busca complementar a Kamala Harris
Tim Walz nació el 6 de abril de 1964 en West Point, Nebraska. Está casado, tiene dos hijos y se retiró como sargento mayor del ejército. Luterano y profesor de geografía, también fue entrenador de fútbol americano.
Enseñó durante algunos meses en China tras las protestas de Tiananmen en 1989.
Cuando surgieron rumores sobre su designación como compañero electoral de Harris, algunos internautas cuestionaron si ambos tenían la misma edad, acompañando sus comentarios con una foto de Walz, calvo. “Fui supervisor de comedor por 20 años. Este trabajo te deja sin cabellos”, respondió Walz con humor en su cuenta de la red social X.
Walz ganó popularidad, especialmente en redes sociales, donde encontró un espacio para movilizar a los jóvenes. En TikTok, plataforma que apodó “TimTok”, acumula millones de “me gusta”.
LEA MÁS: Kamala Harris elige a gobernador de Minnesota Tim Walz como compañero de fórmula
En enero de 2019, asumió como gobernador de Minnesota, un estado en la región de los Grandes Lagos, fronterizo con Canadá. Apenas un año después, enfrentó dos grandes crisis: la pandemia de covid-19 y la muerte de George Floyd, un hombre afroamericano asfixiado por un oficial de policía.
Los republicanos lo critican por ser laxo en su estrategia contra la criminalidad, mientras que los demócratas elogian su defensa de los derechos civiles, incluido el derecho al aborto, un tema central en la campaña.
