Moscú
Rusia anunció el viernes que está retirando un portaviones y algunos otros buques de guerra de las aguas de Siria, como primer paso en la reducción de fuerzas en el país del Oriente Medio azotado por la guerra.
El jefe del Estado Mayor de Rusia, general Valery Gerasimov, precisó que el portaviones Almirante Kuznetsov y los barcos que lo acompañan serán los primeros en salir.
"Los objetivos asignados al grupo aeronaval durante su misión se han alcanzado", precisó el comandante de las fuerzas rusas en Siria, Andréi Kartopalov.
El único grupo aeronaval ruso que participaba en las operaciones aéreas en Siria estaba desplegado en el este del Mediterráneo desde mediados de noviembre.
Sus bombarderos participaron en los ataques aéreos en Siria contra posiciones de grupos yihadistas y en respaldo del Ejército sirio, que retomó en diciembre el control de Alepo, la segunda ciudad del país
Las declaraciones ocurrieron una semana después de que Rusia y Turquía acordaron una tregua en Siria, tras una decisiva victoria, respaldada por Moscú, para el presidente Bashar al-Asad sobre los rebeldes en la ciudad de Alepo.
También es la segunda vez que Moscú anuncia que reducirá su presencia militar en Siria desde que respaldó militarmente al Gobierno de Siria en setiembre del 2015.
El apoyo de Rusia, con ataques aéreos y asesores militares, junto con el incremento de su arsenal y una base naval en la costa siria, cambió el curso de la guerra civil, que está en su sexto año, en favor de al-Asad.
"De acuerdo con la decisión del comandante supremo Vladimir Putin, el Ministerio de Defensa está comenzando a reducir el número de fuerzas armadas en Siria", puntualizó Gerasimov.
No dio más detalles sobre la reducción de fuerzas, que sigue a una orden de Putin emitida el 29 de diciembre.
En marzo, Putin también ordenó que militares rusos retiraran la mayoría de sus contigentes de Siria. Sus declaraciones coincidieron con una breve tregua, negociada por Moscú y Washington, y el lanzamiento de las negociaciones de paz que se realizaron en Ginebra.
Las últimas declaraciones parecieron tener la intención de mostrar a Rusia como mediador de paz.
"Los éxitos de las Fuerzas Armadas sirias en la liberación de Alepo han creado condiciones necesarias para la resolución pacífica del conflicto", afirmó Gerasimov. "Confío en que establecerá la base de la resolución política del conflicto".
Junto a Turquía e Irán, Rusia presiona ahora para celebrar este mes unas negociaciones de paz en Astaná, la capital de Kazajistán.
Las fuerzas de Siria que retomaron la ciudad de Alepo el mes pasado y un posterior cese del fuego hacen que el dispositivo militar ruso sea menos crucial para al-Asad en este momento de la guerra, pero no está claro cuán grande podría ser el retiro .