Washington. AP y AFP. La jueza Sonia Sotomayor se convirtió hoy en la primera magistrada hispana de la Corte Suprema estadounidense al obtener 68 votos a favor y 31 en contra en el Senado.
Sotomayor, hasta ahora jueza federal de una corte de apelaciones en Nueva York, es también la tercera mujer en llegar a la más alta Corte del país, compuesta de nueve jueces de cargo vitalicio.
La mayoría demócrata en el Senado votó en bloque por la candidata elegida el pasado 26 de mayo por el presidente Barack Obama, una mujer de 55 años nacida en el seno de una familia puertorriqueña del neoyorquino barrio del Bronx.
Tan sólo faltó el voto del senador Ted Kennedy, ausente por enfermedad. Nueve senadores republicanos también dieron su beneplácito a Sotomayor, cuya reputación de liberal provocó críticas en los sectores más conservadores del partido opositor.
Los demócratas elogiaron a Sotomayor como una juez de tendencia moderada. La mayoría de los republicanos votaron en contra, con el argumento de que sus inclinaciones hacia la izquierda y prejuicios personales afectarían sus decisiones.
Los senadores tomaron la medida inusual de ponerse de pie para votar, en vista de que se trataba de una situación histórica.
Sotomayor reemplaza a David Souter, un liberal designado por un presidente ultraconservador, y se prevé que su nombramiento no alterará el equilibrio de tendencias.
Con todo, su confirmación dividió profundamente al Senado, y los debates pusieron de relieve las profundas diferencias conceptuales que afectarán las futuras batallas por la composición de la corte. Es probable que durante la presidencia de Obama se produzca una o varias vacantes más.
El Partido Republicano deploró el concepto de Obama de que un juez debe demostrar empatía y quiso presentar a Sotomayor como la encarnación de una pauta errónea que permitiría a un magistrado llevar sus caprichos personales y prejuicios a la corte.
Sus escritos y discursos reflejan la creencia de que la imparcialidad no sólo es imposible sino que ni siquiera vale la pena, dijo el senador Mitch McConnell, líder del bloque republicano. En la corte de la juez Sotomayor, los grupos que no estaban a la altura de sus preferencias solían verse privados de su empatía.