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Colombo. AFP. Los habitantes de Sri Lanka votaron ayer para elegir a su presidente en unas elecciones marcadas por un boicot casi total de la minoría tamil y actos violentos que dejaron tres muertos y 17 heridos.
"Contamos con una tasa de participación de cerca de 75%", dijo el jefe de la Comisión Electoral, Dayananda Dissanayake.
Pero en el noreste, poblado sobre todo por los tamiles mayoritariamente hindúes, "el índice de participación era muy bajo. Hasta el mediodía no ha habido votación", dijo al reconocer que nunca había visto cosa igual.
Participación. Un total de 13,3 millones de votantes fueron convocados a las urnas para elegir presidente entre 13 candidatos. En los últimos comicios presidenciales, celebrados en 1999, el índice de participación fue de 73,3%.
Los votantes tamiles, que podrían desempeñar un papel decisivo en el caso de resultado reñido, cumplieron el boicoteo oficioso de los Tigres de Liberación de Eelam Tamil (LTTE), que luchan por la autodeterminación en el noreste de la isla mayoritariamente tamil, afirmaron varios responsables.
Además, en dos áreas del este del país, rebeldes prendieron fuego a neumáticos y bloquearon caminos para disuadir a los votantes, según las fuentes oficiales.
Esta misma región ha sido escenario de actos violentos pese a una elevada presencia policial.
Tres personas murieron, entre ellas dos presuntos rebeldes, y otras 17 resultaron heridas en varios ataques con granada contra colegios electorales.
Los candidatos favoritos son el actual primer ministro, Mahinda Rajapakse, y el jefe opositor Ranil Wickremesinghe.
