"El plazo de la ONU ha complicado aún más las cosas para que todas las partes tomen los pasos siguientes con vistas a un acuerdo racional en torno a la disputa", afirmó Mottaki.
El miércoles, el Consejo impuso un plazo de 30 días para que Irán suspenda todas sus actividades de enriquecimiento de uranio. El Gobierno de Teherán rechazó el ultimátum e insistió en su derecho a ejecutar el proceso de enriquecimiento nuclear.
Mottaki dijo que Irán seguirá cooperando con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y cumplirá sus compromisos con el Tratado de No Proliferación nuclear (TNP), pero que "no aceptará discriminación" en su derecho a la tecnología nuclear.