Teherán. Reuters. Irán no renunciará a lo que denomina su derecho a enriquecer uranio, como demandan las potencias occidentales, pero está listo para negociar con Estados Unidos, dijo ayer su ministro de Relaciones Exteriores, Manouchehr Mottaki.
"No abandonaremos nuestro derecho natural (al enriquecimiento), no mantendremos negociaciones sobre ello. Pero estamos listos para mantener negociaciones sobre inquietudes mutuas", dijo Mottaki.
Las declaraciones del Ministro fueron la primera reacción oficial iraní a la oferta de Estados Unidos de negociar si Irán cesaba con sus actividades de enriquecimiento.
"Irán apoya negociaciones justas sin discriminación", manifestó, pero agregó que Washington tiene que cambiar su comportamiento si desea nuevas relaciones con Irán.
En un importante giro político, Estados Unidos dijo el miércoles que se uniría a los gobiernos europeos en conversaciones directas con Irán sobre su programa nuclear si se suspendía el enriquecimiento de uranio, que para las potencias tiene como fin desarrollar bombas atómicas.
Viejo. La oferta fue anunciada por la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, antes de la reunión de ayer en Viena.
"La declaración de Rice no fue algo nuevo. Esto es lo que se dijo en sus anteriores discursos y entrevistas. Adolece de una solución lógica y nueva para resolver el tema nuclear de Irán", dijo Mottaki.
"(El anuncio de Rice) Fue como una pieza de literatura (...) y tenía como objetivo ocultar sus fracasos en Iraq y otras partes del mundo", agregó el Ministro.
Irán, el cuarto mayor exportador mundial de petróleo, dice que su programa atómico tiene como fin proveer de energía eléctrica a su población.
Negociaciones directas con Teherán sobre este tema podrían significar un gran giro en las relaciones entre Estados Unidos e Irán, después de que ambas naciones rompieran relaciones luego de la revolución islamista de 1979.