Berlín. AFP y EFE. Con un triunfo histórico en las legislativas en Alemania, la canciller Ángela Merkel logró ayer un tercer mandato de cuatro años, pero sin alcanzar la mayoría absoluta.
Los alemanes “no ofrecieron a la canciller una victoria, sino un triunfo”, comentó el diario Süddeutsche Zeitung . “La República Merkel”, titulaba la edición digital del Spiegel .
Su partido conservador CDU/CSU recabó un 41,5% de votos, según resultados oficiales provisionales. Se trata de su mejor resultado desde el 43,8 % obtenido en 1990 por Helmut Kohl, en medio de la euforia entonces por la reunificación del país.
Su aliado liberal FDP se quedó fuera del Bundestag (cámara federal) por primera vez en la historia de la República Federal Alemana al no alcanzar el mínimo de 5% de votos (4,8%). El partido socialdemócrata SPD, con el que Merkel debería negociar lógicamente una “gran coalición”, obtuvo un 25,7%.
Los Verdes registran un descenso sensible a un 8,3% (-2,3 puntos) y la izquierda radical Die Linke baja 3,3 puntos, a 8,6%.
“La pelota está ahora en el tejado de Merkel. Ella debe ver cómo hace para lograr una mayoría”, advirtió el candidato y líder del SDP, Peer Steinbrück.
Contenida, como siempre, pero emocionada y hasta “íntima” –agradeció el apoyo de su esposo, Joachim Sauer, en una casi declaración de amor insólita en ella–, Merkel fue aclamada en la sede de la CDU, mientras los liberales vivían su hundimiento.
Y es que la principal sorpresa fue la salida del Parlamento del Partido Liberal (FDP). Este tradicional partido bisagra, presente en 17 de los 22 gobiernos que ha habido en la república federal desde la Segunda Guerra Mundial, no llegó al 5% de los votos necesarios para conseguir escaños.
Las opciones de Merkel están pues limitadas: o gobernar en minoría –algo que no ha ocurrido nunca en el país–, aliarse con Los Verdes –que en campaña han ido de la mano de los socialdemócratas– o reeditar la “gran coalición” con el SPD con la que ya gobernó durante su primera legislatura (2005-2009).
La participación en los comicios ha sido más alta que en 2009, cuando se registró la peor en la historia.
Canciller de hierro. Ángela Merkel, coronada como la mujer más poderosa del mundo por la revista Forbes en siete ocasiones, es la primera gobernante en España, Francia, Italia, Portugal o Reino Unido que logró ser reelegida desde el comienzo de la crisis financiera.
La popularidad de Merkel entre el electorado parece inmune a toda crítica a escala internacional, por la tenaza de la austeridad a rajatabla que ha defendido su gobierno frente a sus socios de la UE.
Tampoco parece afectarle que el buen balance, en cuanto a cifras macroeconómicas, de la primera economía europea no se refleje en la microeconomía ciudadana, donde prevalecen los salarios bajos.
Merkel negó el auxilio a los liberales, que pedían desesperadamente votos prestados. La negativa de la canciller a salir al rescate del socio con problemas puesto que dejó parlamentariamente muerto a su aliado tradicional mientras ruge la nueva amenaza del euroescepticismo.
La Alternativa para Alemania, que pretende la salida “voluntaria” del euro de los países en dificultades, logró un resultado parecido al de los liberales, lo que supone un “relevo” en el panorama político alemán poco tranquilizador para Merkel.