1
¿Existen uniones libres de hecho, sin reconocimiento religioso ni civil?
2
¿Son una realidad pastoral relevante en la Iglesia particular los que están separados y los divorciados casados de nuevo?
3
¿Existe en el país una ley civil que reconoce las uniones del mismo sexo equiparadas al matrimonio?
4
¿Qué conciencia se tiene del valor moral de los diferentes métodos de control natal?
5
¿Cómo habría que comportarse pastoralmente, en el caso de uniones de personas del mismo sexo que hayan adoptado niños?
6
¿Con qué actitud los padres se dirigen a la Iglesia? ¿Qué piden? ¿Solo sacramentos?
Ciudad del Vaticano. AFP. El papa Francisco lanzó una consulta mundial sobre la evolución de la familia moderna, por medio de un cuestionario que envió a los obispos de todo el mundo, en el que se abordan temas tabúes como el matrimonio homosexual, las parejas de hecho, el divorcio y la natalidad.
“Hoy se presentan problemáticas inéditas hasta hace pocos años, desde la difusión de parejas de hecho, que no acceden al matrimonio y a veces excluyen la idea de este, a las uniones entre personas del mismo sexo, a las cuales a menudo es consentida la adopción de hijos”, advirtió el “documento preparatorio” de siete páginas, enviado a las conferencias episcopales y que el Vaticano dio a conocer ayer.
El texto incluye el cuestionario con 38 preguntas, en el que se propone a los prelados que respondan a temas vetados hasta ahora por la Iglesia católica.
Una iniciativa que probablemente suscitará reacciones dentro y fuera de la institución, por lo que el mismo relator general del sínodo extraordinario, el cardenal Peter Erdo, arzobispo de Budapest, advirtió durante una conferencia de prensa que no se pretende “cambiar la doctrina católica, sino la manera de encarar esas situaciones”.
La secretaría del sínodo de obispos, encabezada por Lorenzo Baldisseri, envió el cuestionario a las conferencias episcopales de todo el mundo a mediados de octubre y con base en las respuestas preparará un documento, llamado Instrumentum laboris , que sirve de introducción al debate del encuentro de los obispos.
El papa Francisco convocó para octubre del 2014 l a asamblea de obispos , la cual deberá encarar sin tapujos los problemas y las dificultades que aquejan a la familia moderna.
Desafíos a la familia. Bajo el lema “Los desafíos pastorales sobre la familia en el contexto de la evangelización”, la Iglesia liderada por el jesuita argentino Francisco quiere encarar problemas muy actuales.
El mismo Pontífice, que defiende una mayor “colegialidad” en la toma de decisiones, participó en la elaboración del cuestionario, que tiene como objetivo impulsar una nueva evangelización basada en una mayor atención y “misericordia” por todos aquellos que viven en situaciones irregulares.
El Papa pide consejo frente a la adopción de hijos por parte de parejas del mismo sexo, sobre la difusión de las parejas de hecho o sobre la actitud de la Iglesia ante los matrimonios mixtos o interreligiosos, la familia monoparental e inclusive el “alquiler de vientres”.
Con la recopilación de las respuestas se elaborará el documento preparatorio, según la tradicional metodología que se emplea para tales asambleas, entre las más abiertas y democráticas de la Iglesia.
“Proponer un evangelio sobre la familia en este contexto resulta urgente y necesario”, sostiene el documento.
Grandes problemas. “Los problemas son amplios. No es conveniente enterrar la cabeza en la arena”, comentó el secretario general del sínodo, el italiano Bruno Forte.
Entre las preguntas que se les formula a los prelados figura una sobre “la convivencia ad experimentum (experimental), sobre las uniones libres de hecho, sin reconocimiento ni religioso ni civil y sobre los separados y divorciados que se vuelven a casar.
Un apartado de preguntas está dedicado exclusivamente al matrimonio homosexual y a los hijos de esas parejas que corren el riesgo de no ver a sus padres acercarse a los sacramentos, no obstante ser católicos.
Lorenzo Baldisseri reconoció "la gran apertura" que realiza la Iglesia al permitir que hijos de situaciones irregulares –homosexuales, concubinato, divorciados– puedan tener acceso al catecismo y a los sacramentos.
Ese es un principio que el cardenal Jorge Mario Bergoglio defendía desde que ejercía como arzobispo de Buenos Aires y que quiere consultar a todos los estamentos de la milenaria institución que ahora encabeza.
Tras el sínodo extraordinario del 2014 se celebrará en el 2015 un sínodo ordinario, que podría adoptar medidas revolucionarias para la Iglesia católica.
“No lo sabemos. El debate ha sido abierto”, declaró Forte.