Kiev. EFE. Un gobierno de unidad nacional asumió ayer el poder en Ucrania con el tecnócrata Arseni Yatseniuk como primer ministro, bajo la sombra del depuesto Víktor Yanukóvich, quien reapareció para recordar que es el presidente legítimo del país.
“Este será un gobierno de kamikazes políticos. Estoy seguro de que no nos faltarán las fuerzas. Con nosotros está Dios y Ucrania. ¡Gloria a Ucrania!”, afirmó Yatseniuk, de 39 años, después de recibir el apoyo de la Rada Suprema (Parlamento).
Apenas seis días después de la destitución de Yanukóvich por dejación de sus funciones y del triunfo de la rebelión tras tres meses de manifestaciones pacíficas que desembocaron en violentos disturbios, Ucrania vuelve a tener gobierno.
Una mayoría aplastante de 371 diputados de los 417 presentes en la Cámara apoyó la candidatura de Yatseniuk, quien es el líder del principal partido del país, Batkivschina (Patria), creado por la recién liberada ex primera ministra Yulia Timoshenko .
Tras recibir el respaldo parlamentario, Yatseniuk, uno de los líderes de las protestas contra Yanukóvich, presentó a los miembros del Ejecutivo que marcará los designios de este país hasta los comicios presidenciales del 25 de mayo.
El Ejecutivo provisional es un coctel de tecnócratas, activistas opositores y representantes del Maidán, bastión de la oposición desde el pasado 21 de noviembre, conocidos más por su autoridad moral que por sus conocimientos.
Los tecnócratas se encargarán de la Economía, las Relaciones Exteriores y la Defensa, mientras que los representantes del Maidán recibieron como premio las carteras de Cultura, Sanidad y Seguridad Nacional, y quizás los departamentos de Anticorrupción y Depuración.
En su discurso programático, Yatseniuk hizo una encendida defensa de la integridad territorial de Ucrania y llamó a la vecina Rusia a no apoyar el separatismo, en particular en la península de Crimea.