Berlín
Nueve muertos y 21 heridos dejó un tiroteo este viernes en un centro comercial de Múnich (sur de Alemania), según la policía de Múnich, que aludió a un acto cometido "probablemente" por un solo autor que se suicidó.
"En el marco de la investigación, hemos descubierto una persona que se dio la muerte", tuiteó la policía, y añadió que "se trata muy probablemente del autor, que actuó solo".
El autor del tiroteo es un joven germano-iraní de 18 años, cuyas motivaciones hasta el momento siguen "totalmente no dilucidadas", indicó la mañana del sábado el jefe de la policía local.
"El autor es un germano-iraní de 18 años de Múnich", que no era conocido por los servicios de policía, declaró Hubertus Andra en conferencia de prensa.
Los transportes en común volvieron a funcionar la noche del viernes al sábado, según tuiteó la policía bávara. La estación central de trenes de Múnich, que había sido evacuada, reabrió y los trenes que habían quedado bloqueados volvieron a circular.
La policía de la ciudad bávara (sur de Alemania) mencionó un "final de la alerta" lanzada al producirse la matanza, aunque se mantenía "prudente".
La canciller Angela Merkel convocó para este sábado una reunión de su consejo federal de seguridad en Berlín para "analizar la situación", indicó la noche del viernes su portavoz.
Según informaciones recogidas por la AFP, varios testigos dijeron que los atacantes eran hombres con rasgos "árabes". El portavoz de la policía no confirmó esta información.
La televisión alemana de información NTV por su parte indicó que según un video aficionado el autor o uno de los autores de la matanza parece proferir insultos racistas antes de disparar, "lo que puede hacer pensar en un acto de un extremista de derecha".
El tiroteo comenzó poco antes de las 16H00 GMT en una hamburguesería, indicó a la AFP una fuente policial.
Según Bild, un hombre corrió por el centro comercial y disparó a varias personas, antes de huir en dirección a una estación de metro.
Se trata del tercer ataque contra civiles en Europa Occidental en menos de diez días, después del atentado con un camión en Niza (sur de Francia), el 14 de julio, que dejó 84 muertos, y un ataque con un hacha en un tren en Baviera, que se saldó con cinco heridos.
El presidente estadounidense Barack Obama prometió a las autoridades alemanas "todo el apoyo que necesiten", mientras que el jefe de Estado francés, François Hollande, dirigió un "mensaje personal de apoyo" a la canciller alemana Ángela Merkel.
El presidente alemán Joachim Gauck dijo estar "horrorizado" por el "ataque asesino" de Múnich , en un comunicado, expresando su solidaridad a las víctimas y a sus allegados.
La policía desmintió que se hubiera producido un segundo tiroteo en otro lugar del este de la ciudad, pese a que supuestos testigos dijeron haberlo presenciado.
"Es el pánico (que hay) en varios lugares de la ciudad", explicó un portavoz municipal.
Los hechos se producen cuatro días después de un ataque con un hacha perpetrado el lunes en Wurzburgo, cuando un solicitante de asilo atacó a los pasajeros de un tren.
Cinco personas resultaron heridas, en concreto cuatro turistas chinos de Hong Kong en un tren y una transeúnte.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó este ataque, el primero reconocido por esta organización en Alemania. El gobierno alemán duda, en cambio, de que el EI encargara el atentado.
El ministro de Interior, Thomas de Maizière, había advertido el miércoles a sus conciudadanos de que Alemania "se encuentra en el punto de mira del terror internacional".
"La situación es seria, debemos contar con que en Alemania también se prepare para atentados de pequeños grupos o personas radicalizadas", señaló el ministro en una rueda de prensa.
A unos 500 kilómetros de Múnich , el estado de Renania del Norte-Wesfalia anunció que había elevado sus medidas de seguridad con efecto inmediato.
Costarricenses en el lugar
Anne Marie Dorsam, costarricense de ascendencia alemana que está estudiando actualmente en Múnich comentó la situación que se vive en el lugar.
"Es horrible. Tengo amigos atrapados dentro de una tienda que no pueden salir, porque está toda ciudad cerrada: los metros cerrados, los buses no pasan, no hay taxis, todo mundo está corriendo a las casas. Suenan sirenas, suenan helicópteros, suena todo. Es feo, yo nunca había estado en algo así", explicó.
El ministerio de Relaciones Exteriores informó que, de momento, no maneja reportes de costarricenses afectados por el tiroteo. En Alemania viven unos 750 costarricenses.
Información actualizada a la 2:54 p. m.