Oakland, California. AFP. Siete personas muertas y al menos cuatro heridas fue el saldo de un tiroteo ocurrido ayer en una universidad privada de Oakland, mientras la Policía anunciaba poco después la detención del presunto atacante.
La detención del supuesto responsable se produjo en un centro comercial localizado a pocos kilómetros de la universidad cristiana.
Poco antes, la Policía había divulgado una descripción del sospechoso que lo señalaba como un hombre coreano, de unos 40 años, corpulento y con ropa color caqui.
El diario Oakland Tribune publicó que el detenido era un antiguo estudiante de la universidad (de carácter religioso), según informó a la publicación el pastor Jong Kim, fundador del centro educativo.
Kim expresó que no vio el tiroteo, pero sí oyó varios disparos.
“Me quedé escondido en mi oficina”, afirmó el directivo.
La cadena local NBC informó de que la Policía rodeó un edificio cercano a la Universidad Oikos, e imágenes tomadas desde un helicóptero por ese canal mostraban a los agentes sacando varios cuerpos sin vida. La Universidad Oikos imparte materias relacionadas con Teología cristiana, Música y Enfermería, según su página oficial.
En una clase. Según una de las víctimas, Angie Johnson, de 52 años, el autor de los disparos era un antiguo compañero de curso de la Escuela de Enfermería. El hombre se habría levantado en la clase para disparar a quemarropa contra una persona y después a todo el salón.
El suceso tuvo lugar en torno a las 10 a. m. hora local, en una de las clases de la Universidad, a donde entró el sospechoso, quien, hasta ayer, se desconocía si había sido expulsado o solamente había dejado sus estudios, aunque sí se confirmó que ya no era un estudiante activo en la entidad.
Poco después de los disparos, los estudiantes fueron evacuados en vehículos blindados y al menos cinco de ellos ingresaron en un hospital cercano.