Bogotá. Equipos de rescate buscaban sobrevivientes entre el barro de un alud de tierra que hasta el momento dejó 14 muertos y más de una decena de desaparecidos en la carretera que conecta Bogotá con el sureste de Colombia, a la altura del municipio de Quetame, en el departamento de Cundinamarca.
“Ya son 14 los cuerpos hallados sin vida y seis las personas encontradas con vida y trasladadas a puestos de salud y hospitales”, dijo Nicolás García, gobernador del departamento de Cundinamarca, en un video de Twitter. La tragedia fue provocada por fuertes lluvias.
En un primer balance entregado la mañana de este martes, la Defensa civil contó ocho personas muertas, incluido un menor.
“No se logró cuantificar el número de personas desaparecidas, pero se habla de 11 (...) Estamos tratando de identificar a las personas que habitaban en las 20 viviendas arrasadas por la avalancha de lodo y piedras en el caserío de El Naranjal”, dijo el coronel Jorge Díaz, director local de la Defensa Civil colombiana.
El gobernador tampoco precisó cuántos pobladores siguen desaparecidos.
Las fuertes lluvias afectaron la zona desde la noche de este lunes. De hecho, Coviandina cerró la vía de manera preventiva por el deslizamiento de material. Durante la madrugada, el aguacero arreció y causó la creciente de la quebrada Naranjal, la cual ocasionó la avalancha que este martes 18 de julio tiene de luto al país.
El deslizamiento ocurrió cerca de un puesto de peaje ubicado a unos 60 kilómetros de la capital Bogotá y destruyó un puente de la carretera.
El barro obstruye en este momento la vía entre Bogotá y Villavicencio, uno de los principales corredores de carga del país. La carretera, donde este tipo de derrumbes son habituales, permanece cerrada y varios camiones y motocicletas quedaron atrapados en la zona.
Dos metros de barro cubren algunas áreas de la carretera.
Los Bomberos informaron que la emergencia ocurrió pasada la una de la madrugada, sorprendiendo a muchas familias que a esa hora descansaban. Álvaro Farfán, capitán de ese organismo, explicó que la poca visibilidad dificultó las labores de rescate, las cuales desde primera hora de la mañana de este martes se retomaron.
Por su parte, el alcalde de Quetame, Camilo Parrado, informó que la situación en el municipio es muy delicada. “Está complicada la situación en la vía Bogotá-Villavicencio, en el sector Naranjal, pues hay material de arrastre en la carretera sobre el peaje”.
“Los organismos de socorro están utilizando drones para reiniciar la búsqueda. El lodo quedó a casi un metro de altura en algunos sectores, en otros a dos metros, eso es muy complejo”, explicó Parrado.
“Muchos hogares perdieron dos, tres y hasta cuatro miembros de su familia”, añadió.
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Una avalancha de tierra provocó la muerte de al menos 10 personas .
Una madre y sus dos hijos murieron en avalancha en Quetame
Aunque las autoridades informaron que el número de víctimas podría crecer, debido a que son cerca de 20 las personas desaparecidas por la avalancha, ya se confirmó el deceso de al menos 14 personas.
Unas de las víctimas que ya están identificadas, señaló el alcalde Parra, son una madre y sus dos hijos.
“La muerte que llega a Quetame, Cundinamarca, demuestra la imperiosa necesidad de ordenar el territorio alrededor del agua (...) Mi sentido pésame a las familias víctimas”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente, el izquierdista Gustavo Petro.
Este martes se anunció que el Ejército desplazó a 80 militares a la zona para ayudar en la búsqueda de los desaparecidos.
Así van las labores de rescate en Quetame
La vía al Llano, desde Bogotá, está totalmente colapsada por los vehículos que quedaron en plena carretera saliendo de la ciudad hacia Villavicencio antes del cierre.
Los bomberos evacuaron a unos cuarenta sobrevivientes. Seis de ellos fueron llevados con heridas a centros médicos.
El gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, explicó que la comunidad observó otros cuerpos en la parte baja del corregimiento de Naranjal. Además, confirmó en ese momento que eran diez víctimas mortales, además seis personas rescatadas con vida y otras seis remitidas a centros hospitalarios de la zona.
El funcionario detalló que hay afectaciones en el peaje Naranjal y un puente de la zona, lo que impide también la apertura de la vía.
“Todas las unidades de riesgo y Bomberos están haciendo remoción de escombros y búsqueda de personas. La zona no tiene un acceso fácil y debido a que no había luz, solo en la mañana se retomó la labor”, señaló.
García explicó que la misma comunidad está ayudando en la búsqueda de sus seres queridos.
La temporada de lluvias en Colombia inició en junio y suele extenderse hasta noviembre. El año pasado dejó unos 300 muertos y 700.000 mil afectados, incluidas 34 personas que murieron cuando el autobús en el que viajaban quedó sepultado bajo un alud en el occidente del país.