El presidente estadounidense, el republicano Donald Trump, se someterá a un examen médico anual en las próximas semanas, informó la Casa Blanca.
La salud del presidente estadounidense, de 78 años, se volvió un tema especialmente sensible después del ejercicio del demócrata Joe Biden, quien, al final de su mandato, con 82 años, mostraba un caminar cada vez más rígido y una dicción por momentos confusa.
Trump se ha mostrado enérgico para una persona de su edad, pero sus exámenes anteriores generaron dudas sobre los detalles de su salud y la transparencia de los resultados.
En la campaña presidencial previa a su primer mandato, el médico de Trump, Harold Bornstein, publicó una carta en la que afirmaba que la presión arterial del candidato era “asombrosamente excelente” y que, si era elegido, sería “el individuo más saludable jamás elegido para la presidencia”.
Más tarde, Bornstein declaró a la cadena CNN que el propio Trump “dictó toda la carta”. “Yo no escribí esa carta”, aseguró.
Si bien Trump no fuma ni bebe alcohol, no oculta su gusto por la comida rápida y las gaseosas, y su principal fuente de ejercicio parece ser el golf.