La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, informó este sábado durante una gira a Kiev que su equipo tendrá lista “a finales de la próxima semana” su evaluación respecto a una posible candidatura de Ucrania para integrarse a la Unión Europea (UE).
“Las conversaciones que mantuvimos hoy (sábado) nos permitirán tener nuestra evaluación de aquí a finales de la próxima semana”, expresó la responsable al presidente ucraniano Volodímir Zelenski durante una conferencia de prensa conjunta.
La responsable europea viajó a Kiev este sábado en una visita sorpresa consagrada a evaluar la ambición ucraniana de formar parte de la UE y las necesidades de reconstrucción de ese país luego de la invasión lanzada por Rusia a finales de febrero.
“Queremos apoyar a Ucrania en su camino europeo”, expresó Von der Leyen en Kiev.
Varios altos funcionarios y líderes del bloque han advertido que incluso aunque Ucrania consiga el estatuto de candidato, un proceso de admisión puede tardar años o incluso décadas. Ucrania considera la adhesión al bloque como una forma de reducir su vulnerabilidad geopolítica.
En la comparecencia de von der Leyen junto a Zelenski ante la prensa, la alta funcionaria se cuidó de lanzar promesas.
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“Se ha avanzado en el fortalecimiento del estado de derecho, pero todavía se necesitan implementar reformas para luchar contra la corrupción, por ejemplo, o para modernizar esta administración que funciona para atraer a los inversores”, señaló.
Von der Leyen abordó tambien la futura reconstrucción de Ucrania cuando la guerra se termine. “Este debería ser un proceso plenamente dirigido por Ucrania” con la UE lista para ayudar y contribuir a una hoja de ruta para ayudar al país en su “senda hacia Europa”.
Hay expectativas de que la candidatura de Ucrania al bloque reciba una luz verde en la cumbre de la UE a celebrarse el 23 y 24 de junio donde se abordará el tema.
Varios países en Europa del Este apoyan la entrada de Ucrania sin embargo el Reino de los Países Bajos y Dinamarca si han expresado reticencias y Alemania permanece sin definir su posición.