EscucharEl presidente de Colombia, Álvaro Uribe, promulgó dos leyes para aumentar los impuestos y reducir la burocracia, medidas exigidas por el FMI y tendientes a cubrir un agujero fiscal y financiar la lucha contrainsurgente, informaron ayer fuentes oficiales.
Uribe promulgó ayer la ley de reforma tributaria que contempla incrementar a partir de hoy los impuestos al valor agregado (IVA), el de la renta y el que pagan los asalariados, así como el precio de los combustibles, de acuerdo con el servicio gubernamental de información.
Asimismo, la norma prevé penas de prisión para los evasores de impuestos y los contrabandistas de gasolina.
La ley ordena cobrar el IVA a muchos servicios y productos de consumo masivo hasta ahora exentos del gravamen y aumentar ese impuesto a partir del 2005 a sectores como los de la cerveza, los juegos de suerte y azar y la telefonía celular (móvil).
“Recursos frescos”
Según se indicó, los recursos que se obtendrán por el cobro del IVA –calculados en unos $357 millones anuales– se destinarán a financiar la lucha de las fuerzas de seguridad contra las guerrillas izquierdistas, los paramilitrares de extrema derecha y los narcotraficantes.
El Gobierno calcula que con la nueva reforma tributaria obtendrá en total recursos por unos $714 millones adicionales en el año 2003, que incluye, además, el cobro de una sobretasa al impuesto de la renta.
Menos burocracia
Uribe también promulgó una ley que le otorga facultades especiales para modernizar, fusionar, crear y liquidar entidades del Estado, se informó.
Así, el mandatario fusionó los ministerios del Interior y Justicia, los de Salud y Trabajo –que en adelante será el de la Protección Social– y los de Comercio Exterior y Desarrollo Económico, integrados en el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, se informó.
El Ministerio del Medio Ambiente asumirá el viceministerio de Vivienda, a cargo hasta ahora de la cartera de Desarrollo Económico, según la ley.
La reestructuración del Estado supone la eliminación de unos 40.000 cargos públicos, aunque el Gobierno dará un “reconocimiento económico” a los trabajadores que pierdan sus empleos, señalaron las fuentes oficiales.
Las leyes promulgadas por Uribe hacen parte de un drástico plan de ajuste exigido por el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el que Colombia se dispone a suscribir una carta de intención en los próximos meses.
