EscucharCaracas. El gobierno de Venezuela denunció este lunes que su industria petrolera sufrió tres “ataques” la semana pasada, generando pérdidas millonarias. Señaló como responsables a la líder opositora María Corina Machado y al exmiembro de los Navy SEAL de Estados Unidos, Erik Prince.
Dos de las agresiones ocurrieron en instalaciones de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). Una afectó el este del país y la otra golpeó la principal refinería, ubicada en el oeste, según informó la vicepresidenta Delcy Rodríguez en una conferencia de prensa.
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Rodríguez vinculó a Prince con los ataques tras citar una publicación del contratista militar en su cuenta de la red social X. En el mensaje, Prince hacía referencia a una explosión en un complejo de operaciones venezolano.
“El señor Prince sale diciendo que fue atacado el complejo, que explotó un gasoducto en el centro de operaciones Muscar, en Monagas”, afirmó Rodríguez, mientras mostraba una foto del mensaje. También lo relacionó con Machado, a quien calificó de “terrorista”.
La vicepresidenta no ofreció detalles concretos sobre la conexión entre Prince y la dirigente opositora, actualmente en la clandestinidad tras denunciar fraude en las elecciones presidenciales de julio. El mandatario Nicolás Maduro declaró que Machado abandonó el país, pero ella lo niega.
“Todos estos ataques, como dijo la vicepresidenta, tienen nombre y apellido. Se planifican desde Colombia. Detrás de ellos está el mundo del narcotráfico y el paramilitarismo, liderado por la reina ‘paraca’, María Corina Machado”, sostuvo Maduro en su programa de televisión semanal.
“Ella está detrás de estos planes. Se fue del país para concentrar su maldad y su fascismo en dañar a Venezuela”, agregó el mandatario.
Rodríguez detalló que los ataques afectaron a la industria petrolera, la petroquímica, empresas siderúrgicas y el sistema eléctrico. El estado Nueva Esparta, al norte del país, sufre cortes prolongados de electricidad, incluyendo la turística isla de Margarita.
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Las instalaciones petroleras y eléctricas cuentan con fuerte presencia militar. El gobierno izquierdista suele denunciar ataques, que atribuye a la oposición.
La instalación más dañada fue el complejo Muscar, que distribuye el 80% del gas en Venezuela. Una explosión allí el pasado 11 de setiembre dejó cinco trabajadores heridos y provocó la detención de 11 personas.
Según el gobierno, las pérdidas totales superan los $240 millones. En PDVSA, el impacto económico asciende a $157,8 millones; en la industria petroquímica, a casi $56 millones; y en las empresas básicas siderúrgicas, a casi $30 millones, informó Rodríguez.
