Caracas. AFP. Los venezolanos eligen hoy a los gobernadores de los 23 estados, en unos comicios marcados por el delicado estado de salud del presidente Hugo Chávez y en los que el gobernador Henrique Capriles se juega su liderazgo en la oposición al buscar su reelección en Miranda (norte).
Chávez, de 58 años, se encuentra en un proceso de recuperación “complejo y duro” en La Habana tras someterse el martes a su cuarta cirugía contra el cáncer que padece desde mediados del 2011 y cuya ubicación se desconoce. Su evolución es “satisfactoria”, informó el viernes el Gobierno.
En las regionales, el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) busca reconquistar los feudos de la oposición, especialmente el petrolero Zulia y Miranda, los más acaudalados y poblados.
El chavismo controla al presente 15 estados; la oposición, siete, y uno, Monagas, es independiente.
“Está completamente aceitada la maquinaria que conduzca a las fuerzas de la patria y a las fuerzas de Chávez a la más inmensa victoria” en los comicios, dijo el viernes el jefe del comando de campaña del PSUV, Jorge Rodríguez, quien agregó que el oficialismo desplegó para los comicios más de 180.000 observadores voluntarios.
Como en las presidenciales de octubre, en las que Chávez ganó con un 55% de los votos para un tercer mandato de seis años, el PSUV desplegó su estrategia del ‘uno por diez’, para que cada simpatizante chavista consiga diez votos.
Reto a la oposición. De su lado, la oposición tratará de conservar los bastiones que logró en las elecciones del 2008, cuando la participación alcanzó el 66%, y su líder, Capriles, peleará su reelección en Miranda ante el ex vicepresidente Elías Jaua, tras perder las elecciones presidenciales con Chávez.
Según los analistas, Capriles se juega su futuro político por partida doble porque necesita la victoria para reforzar su liderazgo tras obtener la mayor votación alcanzada por la oposición frente a Chávez (44% de los sufragios) y garantizar además su candidatura en caso de que el mandatario no pueda asumir su tercer mandato el 10 de enero y se convoquen nuevas elecciones en un plazo de 30 días.
Anticipando ese posible escenario, antes de someterse a la cirugía, Chávez encargó que el vicepresidente y ministro de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro, asumiera en ese caso la presidencia temporal y fuera candidato del oficialismo en los comicios.
Ante la falta de Chávez, el vicepresidente asumió el lugar que habitualmente ocupó el mandatario en las campañas, en los que todos los candidatos oficialistas pidieron a los votantes hacer una ofrenda al presidente y logró una victoria contundente, lo que fue rechazado por la oposición al considerar que se usó la enfermedad presidencial con fines electorales.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) dispuso el viernes 12.784 centros de votación y 36.220 mesas electorales, que serán abiertas a partir de las 6 a. m. hasta las 6 p. m. locales y a las que están convocados más de 17,4 millones de venezolanos.
No obstante, el CNE permitirá que sigan votando los ciudadanos que todavía estén en la cola a la hora del cierre. Los resultados serán publicados entre dos y cinco horas después de cerradas las urnas y sólo cuando la tendencia sea irreversible.
La presidenta del CNE, Tibisay Lucena, indicó el viernes que estas elecciones son “más complejas” en cuanto a logística que las presidenciales de octubre, porque además de gobernadores se elegirán 237 diputados de consejos regionales.
Los cuerpos de seguridad desplegaron 141.000 efectivos y desde el viernes en la tarde se prohibió el consumo y venta de bebidas alcohólicas. Además, el jueves se cerró la frontera con Colombia para peatones y vehículos.