El próximo lunes se iniciará el juicio por las fallas presentadas en el nuevo hospital San Rafael de Alajuela.
En la causa figuran como implicados un trabajador del consorcio constructor Obrascón Huarte Laín-Expansión Exterior, Hernando Lazo Valladares, y el exsubgerente de operaciones de la Caja, Israel Moya Rodríguez.
Según informó la dirección jurídica de la Caja, el juicio será en el Segundo Circuito Judicial. Está previsto que se prolongue hasta el 18 de setiembre.
A Lazo y a Moya se les enjuiciará por los presuntos delitos de estafa e incumplimiento de deberes, informó Wílliam Rodríguez Alvarado, uno de los dos abogados que defenderán a la Caja en esta causa.
Aparentemente, los funcionarios implicados no siguieron los procedimientos para hacer valer las garantías de una obra que le costó a la institución $40 millones.
Rodríguez dijo que la pretensión de la Caja es cobrar $3,6 millones como parte de los daños materiales, y $1 millón por daño moral a persona jurídica. Estos montos se le cobrarían a Lazo y a Moya.
Voceros del consorcio constructor se mostraron seguros de que su trabajador saldrá bien librado de este nuevo pulso con la CCSS.
El encargado técnico del consorcio, Eduardo Cascante, aseguró ayer que la empresa ha cumplido con todas las mejoras solicitadas por la Caja e incluso más.
Esa lista la integraban 159 fallos detectados en el edificio, entre ellos, problemas en el servicio de nutrición y en varios equipos.