El Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) se comprometió a reemplazar más de 450.000 medidores de agua con el objetivo de garantizar un “cobro justo” por el consumo del líquido por parte de los abonados.
La entidad hizo este anuncio tras las advertencias de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), que señaló que el 80% de los medidores del AyA no registran correctamente el consumo de agua en los hogares, industrias y comercios.
En respuesta a las acusaciones de la Aresep, el AyA informó que la sustitución de los medidores comenzará en los “próximos meses” y abarcará el 50% del total de hidrómetros.
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Además de asegurar un cobro justo para los abonados, el AyA destacó que esta inversión también garantizará la sostenibilidad financiera.
La entidad añadió que, en relación con el problema del desperdicio de agua señalado por la Aresep y que es causado por tuberías en uso durante más de 50 años, actualmente se están realizando inversiones para renovar la infraestructura y mejorar los procesos.
Entre estas acciones se encuentra el Proyecto de Reducción de Agua No Contabilizada y Eficiencia Energética (RANC-EE), que actualmente está llevando a cabo obras en áreas como Palermo y Anonos en Escazú; Copey y Cinco Esquinas en Tibás, y la Hulera - San Rafael de Escazú, donde se ha detectado una alta incidencia de fugas.
El AyA también rechazó las acusaciones sobre las tarifas bajas que se cobran a las municipalidades.
“No estamos de acuerdo con las afirmaciones planteadas por la Aresep de que el AyA prácticamente regala el agua a ciertas municipalidades. Para nuestra institución, lo primordial es que todas las personas del país tengan acceso al agua. El cobro a las municipalidades de Cartago, Paraíso, La Unión y Oreamuno compromete directamente el suministro de agua a los habitantes de esas comunidades, y por este motivo vamos a proponer alternativas para ajustar estos cobros tarifarios con el menor impacto posible”, indicó el ente en un comunicado.
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Según la Aresep, el AyA vende agua a las municipalidades de Cartago, Paraíso, Siquirres y Santa Cruz de Guanacaste a un precio de ¢25 por metro cúbico, mientras que los demás usuarios pagan ¢305 por metro cúbico, lo cual solo cubre los costos de captación y conducción.
Esta diferencia en el trato entre el AyA y las municipalidades resultará en un costo adicional de aproximadamente ¢9.000 millones para todos los abonados a nivel nacional, sumado a las pérdidas no registradas y cobradas correctamente en puertos y aeropuertos.
Además, los errores en los medidores hacen que los abonados paguen una tarifa más alta, ya que se redistribuyen los costos entre quienes tienen medidores defectuosos y aquellos que los tienen en buen estado. Esta omisión ha llevado a una pérdida de ingresos de aproximadamente ¢544 millones en las tres regiones estudiadas, agrega la Autoridad Reguladora.