Para darle una nueva imagen, mejorar la calidad de los programas y ofrecer un mejor producto, el canal 4 de televisión necesitará alrededor de ¢716 millones ($2,8 millones) en inversión, según los cálculos iniciales revelados por su nuevo gerente, Pedro Odio Salazar.
La televisora, que ya no pertenece a la firma Multivisión de Costa Rica S.A. -del empresario Arnoldo Vargas-, sino a Tele América S.A. -de reciente fundación-, fue traspasada oficialmente el lunes a un grupo de inversionistas costarricenses y a la cadena mexicana TV Azteca, que posee el 35 por ciento de las acciones.
Odio, quien llegó al país el miércoles, concedió una entrevista a un equipo de La Nación, en la que se trató las relaciones entre la empresa mexicana y los inversionistas locales, y los cambios que se aplicarán en la televisora.
El ejecutivo, quien representa al nuevo grupo de inversionistas nacionales que posee el 65 por ciento de la empresa, manifestó que TV Azteca "no inyectará un cinco" de capital a canal 4 y que más bien prestará el dinero para modernizarlo.
Según Odio, se llegó a ese arreglo puesto que "cuando una empresa obtiene dinero barato es ineficiente... Ellos (TV Azteca) nos dicen que quieren que crezcamos, pero que su dinero tiene valor y que nos lo van a dar en esas condiciones". Dicho crédito tendrá una tasa fija y dos años de gracia para pagar, con la ventaja de que la administración no tendrá que ofrecer ninguna garantía a la hora de solicitarlo.
Comentó que contrataron al especialista en televisión Marcos Esparra (de México), para que haga una valoración de todo el equipo técnico del canal y así justificar cada una de las compras que se realizarán.
Repartición accionaria
Sobre la participación accionaria de TV Azteca, el nuevo gerente explicó que cuando esta firma mexicana se dio cuenta de que la Ley de Radio y Televisión prohíbe que empresarios extranjeros posean más del 35 por ciento de un medio de comunicación nacional, empezaron a buscar socios locales para levantar el proyecto.
Añadió que se buscó gente que no tuviera color político, compromisos comerciales (deudas) ni estuviera relacionado con otra empresa del ramo, con el fin de "darle total independencia al medio".
De esa forma, TV Azteca tendrá el 35 por ciento del canal y cuatro inversionistas nacionales, entre ellos Odio, el restante 65 por ciento, quien no quiso revelar los nombres de sus socios.
En total, los inversionistas pagarán a Vargas de forma escalonada cerca de $6,8 millones (¢1.740 millones) por la estación.
En la junta directiva, Odio quedó también como presidente y estará acompañado por Ignacio Santos (director del noticiario NC4), Mauricio Morales y Francisco Blanco, de TV Azteca. Arnoldo Vargas fue nombrado presidente honorario.
Sobre la posible reestructuración en el canal, puntualizó que el noticiario se va a fortalecer y mencionó la posibilidad de ampliar la planilla de periodistas, camarógrafos y choferes, aunque no precisó datos.
En el resto del canal, dijo, lo que está ocurriendo es un proceso de sustitución pues se están buscando personas que ocupen los cargos que dejaron los anteriores administradores.
En relación con la concesión del canal 9, que opera Representaciones Televisivas S.A. (Repretel), Odio aseguró que ese no es asunto de ellos pues esa estación pertenece a la firma Multivisión de Costa Rica, propiedad de Vargas.