Cuatro fuentes de agua que abastecen Asadas de comunidades en la zona norte de Cartago presentan concentraciones de plaguicidas superiores a los niveles permitidos.
De acuerdo con los resultados divulgados la noche de este lunes por el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), las nacientes afectadas son Benjamín, Coliblanco, Aquiles y San Martín, las cuales abastecen a las Asadas de Santa Rosa de Oreamuno, norte de Pacayas y San Rafael de Irazú.
Las pruebas realizadas en esta zona, caracterizada por su intensa actividad agrícola, detectaron altas concentraciones de metabolitos de clorotalonil, cuyo uso está prohibido en el país desde el año pasado.
En estas fuentes se emitirán órdenes sanitarias para evitar el consumo del líquido hasta que las concentraciones de los metabolitos de riesgo disminuyan, según lo indiquen futuros muestreos.
Los análisis realizados por el AyA revelaron, además, que de las fuentes evaluadas, 71 presentan condiciones seguras para el consumo, lo que permite levantar las órdenes sanitarias que pesaban sobre 20 nacientes que abastecen las Asadas de Cipreses, San Pablo y Santa Rosa.
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El presidente del AyA, Juan Manuel Quesada, precisó que las nacientes afectadas suministran agua a unas 700 personas, quienes serán abastecidas mediante camiones cisterna. Asimismo, adelantó que se trabajará en la interconexión con otras fuentes de agua.
Los estudios en esta región comenzaron en julio y estuvieron a cargo del Ministerio de Salud, el AyA, el Ministerio de Ambiente y Energía, y el Ministerio de Agricultura. También participaron expertos de la Universidad Nacional y la Universidad de Costa Rica.
La ministra de Salud, Mary Munive, pidió a los habitantes de Oreamuno, Cervantes, Paraíso, Pacayas y Alvarado que estén atentos a las medidas de restricción en el consumo de agua que puedan girarse en los próximos días y que solo consuman el agua distribuida por los cisternas en las zonas donde se determine que el suministro regular no es apto para consumo.
De acuerdo con el Instituto Regional de Estudios en Sustancias Tóxicas de la Universidad Nacional (IRET-UNA) el clorotalonil es un fungicida que se usa en hortalizas para el control de enfermedades en cultivos causadas por hongos. Su uso se prohibió en el país desde noviembre del año pasado por su alta toxicidad.