Concluida la autopsia a la 1 p. m. de ayer, las autoridades judiciales descartaron la presencia de lesiones por arma de fuego o arma punzocortante en el cuerpo de la holandesa Kertin Denisse Goedbloed.
Fue posible determinar, además, que sufrió una fractura en el tobillo, que ella misma trató de entablillar.
Pese a todos estos resultados, aún no se ha logrado establecer hace cuántos días se produjo el deceso, pues su avanzado estado de putrefacción podría ser debido a la humedad característica de la zona. Tampoco es posible precisar la causa de la muerte.
Los restos de esta psiquiatra de 33 años y madre de tres hijos fueron localizados el martes en la margen del río Coén, en las montañas de Talamanca, donde desapareció desde fines de julio.
Supuestamente, iba acompañada por el australiano Murray Andrew Scott, a quien también se daba por fallecido.
Empero, ayer autoridades de Migración y Extranjería informaron a la Cruz Roja que este hombre cruzó la frontera por Sixaola y se encuentra en Panamá.
Ambos comenzaron juntos la caminata e incluso algunas pertenencias del australiano fueron halladas el lunes a orillas del río Coén.
El rastro
El primer rastro positivo de la mujer fue hallado el viernes pasado por el teniente de búsqueda y rescate de la Cruz Roja José Campos.
Se trató de la marca de un descenso hacia un valle cerrado. Dos días después localizaron resbalones y hojas rotas.
Muestra de que iban por el rumbo correcto, el lunes encontraron salveques, zapatos y el pasaporte de la holandesa.
Todo esto estaba en un nido o colchón de hojas, donde según Campos ella permaneció algún tiempo.
"Estuvo varios días ahí y luego intentó cruzar el río pero fue arrastrada como un kilómetro y medio, logró salir y se metió en una zona de bosque cerrado. Allí se quitó un zapato, puso la media adentro y se sentó en una piedra", aseguró el experto en montaña.
Fue en este sitio donde la halló una patrulla integrada por cuatro baquianos y dos cruzrojistas.
"Vieron un par de zopilotes y sintieron el fuerte olor, fue así como la encontraron", detalló.
El retorno
La noticia del hallazgo de Kertin Denisse Goedbloed llegó rápido a conocimiento de su hermano Sven y su padre, cuyo nombre no fue posible obtener, pues ambos se encontraban en la zona.
"Ellos han recibido mucho apoyo de esa comunidad, porque tenían varios días de estar allí", comentó ayer Antonio Schutte, funcionario de la Embajada de Holanda.
Los parientes llevarán el cuerpo a su país el domingo, cuando salgan de Costa Rica en un vuelo de la compañía Martinair.