Más de 200 madres adolescentes de colegios públicos del país necesitan un subsidio para poder continuar estudiando luego de las vacaciones de medio periodo, que van del 6 al 17 de julio.
El Ministerio de Educación Pública (MEP) tramita con el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) una ayuda para estas jóvenes, ya sean madres adolescentes o embarazadas, quienes están en riesgo de quedar excluidas del sistema educativo.
El monto de la subvención será definido la próxima semana.
Las colegiales fueron detectadas mediante el Sistema de Alerta Temprana del MEP, que consiste en que directores, educadores y orientadores hallen casos de alumnos en riesgo de dejar las aulas y busquen una solución antes de que eso ocurra.
Aparte de un embarazo, existen otras señales que podrían advertir a los docentes de una posible deserción de sus pupilos, como bajas calificaciones, ausentismo y problemas familiares o económicos.
“Si se presentan dos o más de estos indicadores, deben ser atendidos antes de que se conviertan en causantes de exclusión, ya sea por los funcionarios del centro o por oficinas centrales”, dijo Alexandra Ulate, del MEP.
Sin tareas. El Ministerio indicó que, para estas vacaciones, los profesores no deben dejar tareas ni aplicar pruebas para la semana en que regresan los alumnos, con el fin de que estos 15 días sean solo para descanso.
A pesar de los días libres, el MEP anunció que los comedores de escuelas ubicadas en Sarapiquí (Heredia), Talamanca, Limón, Matina, Pococí, Siquirres, Guácimo (Limón) y en Turrialba (Cartago), seguirán abiertos.
Los centros educativos de estos cantones debieron cerrar debido a la afectación por lluvias hace una semana. El MEP presentó un plan para recuperar las lecciones tras las vacaciones.