El Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) usará $35 millones de Fonatel para brindarle Internet de banda ancha a casi 2.400 escuelas y colegios públicos, al 2024.
Con ese ajuste en el Plan Nacional de Desarrollo de las Telecomunicaciones (PNDT), se podrá al menos arrancar con el proyecto Red Educativa del Bicentenario en el cual trabajan el Micitt, el Ministerio de Educación Pública (MEP) y la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), a cargo del Fonatel.
Según ese proyecto, el MEP atendería con recursos propios 2.139 centros educativos al año 2022. De ellos, 1.662 centros se conectarían este año y otros 477 el próximo.
Entretanto, los $35 millones financiarían programas que saldrán a concurso público para enlazar al servicio a 2.375 centros educativos.
Sin embargo, este año solo se conectarán 516 instituciones, mientras el resto se irá integrando a lo largo de los siguientes tres años.
Lo anterior ocurre debido a que Sutel continúa sin completar los análisis para la parte del proyecto que le corresponde, indicó este lunes Paola Vega Castillo, jerarca del Micitt.
El anuncio de Ciencia y Tecnología es un nuevo intento de asegurar conectividad, sobre todo para estudiantes de menores recursos, luego de años de incumplimientos de los gobiernos.
La necesidad se hizo aún más evidente con el programa de educación a distancia que debió aplicarse durante el 2020 por la pandemia.
Diferencias sobre atrasos
En octubre de 2019, el Micitt remitió a Sutel el diseño de la Red Educativa del Bicentenario propuesto por el MEP, para que realizara el análisis de factibilidad técnica, jurídica y económica para financiarla con recursos del Fondo Nacional de Telecomunicaciones ( Fonatel).
Sin embargo, la Superintendencia presentó resultados parciales al Micitt y al MEP hasta julio del 2020, y de acuerdo con las previsiones de Sutel, lo pendiente sería completado en agosto de este año; confirmó la ministra Vega.
La jerarca fue clara en señalar a la Sutel por los atrasos vinculados a la Red Educativa del Bicentenario. La Superintendencia, por su parte, le endosa a ese ministerio la demora, según un comunicado de prensa difundido el viernes.
“La Sutel celebra que, aunque tarde, el Micitt haya tomado una decisión para incluir en la política pública un proyecto que es fundamental para la educación y la niñez del país”, afirmó Federico Chacón, presidente del Consejo Directivo de Sutel.
Vega explicó que el proceso se alargó por la interacción con Sutel y MEP, debido a que las necesidades identificadas por el segundo “no han coincidido con las propuestas de ejecución planteadas por Sutel y porque no atienden todos los requerimientos de ese ministerio”.
Según ella, el Micitt ha ejercido su potestad como ente rector para solicitar la información a Sutel “hasta que se tenga suficientemente clara y completa para la formulación adecuada de las metas y que realmente resuelvan las necesidades” planteadas por el MEP.
Críticas
La lentitud para atender la urgencia de conectividad ha sido objeto de críticas y cuestionamientos por años.
En julio pasado, por ejemplo, la expresidenta de la República, Laura Chinchilla, fue una de las que alzó la voz luego de que trascendiera que 500.000 estudiantes carecían de Internet o equipo para recibir clases virtuales.
“Voy a hablar con mucha franqueza. Si desde el MEP no han sido capaces de expresar en el Plan Nacional de Telecomunicaciones, con la urgencia requerida, metas para eliminarle a Fonatel cualquier excusa para atrasar las cosas que debieron hacer antes, si esto ha sido así, estoy segura que en otras áreas tampoco hay preparación”, expresó.
Un mes antes, en junio de 2020, la contralora general de la República, Marta Acosta, aseveró que Fonatel tenía más de ¢198.000 millones en activos líquidos que la Sutel no había sabido ejecutar para reducir la brecha digital en Costa Rica.
Así lo afirmó durante una comparecencia en la Asamblea Legislativa.
“En Fonatel ha habido una lenta ejecución de los proyectos. Es un tema que lo hemos reiterado. Habría que definir qué se quiere, si buscar que se cierre la brecha digital presionando a la Sutel y a Fonatel para que cumplan, o utilizar esos recursos para otros objetivos”, explicó la contralora.