A través de redes sociales, se intensifican los llamados y cuestionamientos contra las clases de educación sexual que imparte el Ministerio de Educación Pública (MEP).
Desde inicios de esta semana circula una encuesta que consulta a los padres sobre la posibilidad de no enviar a sus hijos a escuelas y colegios el próximo 8 de febrero, cuando está previsto el inicio del curso lectivo 2018.
La medida, señalan los organizadores, se mantendría "hasta que el MEP retire las guías de afectividad y sexualidad".
LEA MÁS: Clases de sexualidad abordan más que diversidad y placer
Para este viernes, además, organizaron una manifestación frente a Casa Presidencial, en Zapote, que tiene dos objetivos, según explicó Juan Calderón, uno de los líderes de estos grupos.
El primero es solicitar la modificación de los contenidos de las programas de educación sexual y además exigir la renuncia de la ministra de Educación, Sonia Marta Mora.
“Es una manifestación pacífica pero vehemente en contra de la ideología de género que está en las guías (programas). No estamos en contra de la educación sexual, lo que estamos es en contra del contenido del MEP, vamos a pedir que se quiten esas guías y se hagan nuevas con una enseñanza seria y con valores para nuestros niños”, afirmó.
Según dijo también pedirán la renuncia de la ministra y la eliminación de tres decretos asociados a los programas de Educación para la Afectividad y Sexualidad del MEP.
Movimiento futuro
Sobre las encuestas, Calderón afirmó que podrían dar insumo para uno de los movimientos a futuro en caso de que sus peticiones no sean escuchadas.
Es decir, que de no ser atendidas, llamarían a los padres a no enviar a sus hijos a los centros educativos.
En es sentido, la ministra de Educación reiteró que se respetará la decisión de los padres que no quieran que sus hijos reciban la asignatura, al tiempo que minimizó el llamado a "huelga" del que cientos de padres han respondido que estarían dispuestos a seguir.
"Conocemos al pueblo de Costa Rica y las familias saben el valor de la educación, saben sus responsabilidades en materia de la educación de sus hijos y confiamos en que más allá de la crispación de este momento, con serenidad, al inicio del curso lectivo, los padres y madres que no estén de acuerdo con que sus hijos asistan a esa asignatura tienen la garantía de que pueden hacer el procedimiento para excluirlos de esa materia", dijo.
Mora insistió en la necesidad de impartir los programas y la obligación del Ministerio en relación con esta temática.
"Esa labor nos toca, hemos recalcado la importancia que tienen estos programas. Costa Rica tiene enormes retos en esta materia, tiene una manifestación muy acusada de relaciones impropias, tenemos el embarazo adolescente, las enfermedades de transmisión sexual y la constancia de que los docentes dicen que los estudiantes carecen de información básica para analizar lo que tiene que ver con la sexualidad; tenemos violencia hacia las mujeres, relaciones sexuales que comienzan muy temprano… ", explicó Mora.
LEA MÁS: Cambios en programas del MEP: Hay que hablar de la diversidad sexual y género
Ante consulta de este diario, el abogado constitucionalista Fabián Volio recordó que tanto en la Constitución Política como en la Ley Fundamental de la Educación establecen que esta es obligatoria.
Incluso, explicó el especialista, establece que podría traerse a los niños a la escuela con ayuda de la Policía.
"Cuando ya es masivo, hay un componente práctico para ejecutar la ley, pero teóricamente los pueden forzar a llegar clases. Eso está previsto por la ley", indicó.
No obstante, ese escenario, por el momento, no está contemplado.