Con el fin de evitar el abandono en las aulas, 1.700 madres adolescentes, que se encuentran en situación de vulnerabilidad, recibirán una beca de ¢100.000 cada mes para que puedan continuar con sus estudios.
Además de la asistencia económica, que suma ¢170 millones mensuales entre todas las beneficiadas, las madres recibirán apoyo educativo, servicio de cuido y complemento nutricional.
Según datos recopilados por el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), cada 90 minutos nace en Costa Rica un bebé cuya madre tiene entre 12 y 17 años.
La beca para madres adolescentes es parte de las nuevas estrategias del Ministerio de Educación Pública (MEP) para tratar el tema del abandono en las aulas, que trabaja en coordinación con el Patronato Nacional de la Infancia (PANI).
"Gracias a este nuevo enfoque, ya no es la estudiante la que debe acercarse a una instancia gubernamental a realizar el trámite, ahora desde el centro educativo se le brinda ayuda a las madres adolescentes para completar los requisitos necesarios, y posteriormente se les da atención prioritaria en el proceso de análisis y asignación de las becas. Este esfuerzo interinstitucional ha permitido que menos madres adolescentes abandonen las aulas y que los subsidios lleguen a quienes más lo necesitan", indicó María Alexandra Ulate, coordinadora del programa "Yo me apunto".
Para seleccionar a las beneficiarias, se contemplan algunos indicadores de vulnerabilidad como: la condición de embarazo, que el hijo o hija no cuenten con el apoyo económico ni emocional del padre, rezago escolar o antecedentes de exclusión del sistema educativo, que las beneficiadas estén dedicadas al cuido de su propio hijo o hija, entre otros.
El programa existe desde el 2015 en 79 centros educativos e incluye a estudiantes con edades entre 10 y 19 años que enfrentan una situación de embarazo, maternidad, pobreza y necesidades en salud. Además, se brinda apoyo a padres adolescentes.