Un día después de alegar la falta de datos concretos sobre la cantidad de estudiantes que van a las aulas nacionales, el Ministerio de Educación Pública (MEP) emitió un informe con cifras preliminares sobre este tema.
La institución indicó que un 88% de los 1.206.800 estudiantes matriculados en el sistema educativo están asistiendo de forma presencial este 2021.
De acuerdo con el MEP, la mayoría (72%) recibe clases en formato de educación bimodal, en el cual se trasladan solo algunos días a los centros, mientras la menor parte (16%) estudia de forma presencial diariamente.
Estos datos son comunicados horas después de que La Nación publicara que, a más de dos meses de iniciado el curso lectivo, el MEP ignora información básica sobre el desarrollo de la educación combinada de clases presenciales y virtuales.
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De hecho, después de varios intentos, este diario volvió a preguntar por esas cifras la mañana de este jueves, pero la oficina de prensa de la institución respondió que apenas se estaba evaluando la información y que se iba a liberar hasta la próxima semana.
Este viernes por la tarde, minutos después de que la cartera comunicara los datos, La Nación le consultó que cómo era posible que hace 24 horas no habían cifras concretas, pero que luego de nuestra publicación sí consiguieron finalizar las cuentas.
Cerca de las 10 p. m., la entidad contestó que terminó de recabar la información el pasado 5 de abril y que debido al reciente reportaje publicado por este medio, se vieron “obligados a sacar los primeros datos” que tenían a mano.
En su comunicado, el ministerio señaló que los datos preliminares fueron recopilados mediante el módulo de encuestas de la plataforma Saber, aplicada a más de 5.000 instituciones educativas del país, como parte del primero de tres censos que se realizan al año.
Asimismo, reportó que del total de 5.276 instituciones y servicios educativos que se ofrecen este año, la mayoría de ellos (67%) opera en formato de educación bimodal, mientras que 33% trabaja mediante educación presencial, exclusivamente.
“De acuerdo con los datos recopilados, en la educación bimodal, una parte del currículo se aborda de forma presencial en las instituciones educativas y, otra parte, se aborda mediante la educación a distancia, con el apoyo de ambientes virtuales de aprendizaje u otro tipo de apoyos educativos”, argumentó el MEP.
Al parecer, el censo revela que la mayoría de los centros educativos que se encuentran ofreciendo el servicio de forma presencial son los que tienen la menor cantidad de estudiantes en sus aulas.
El 75% corresponde a escuelas unidocentes (de 30 o menos estudiantes) y Dirección 1 (de 31 a 90 estudiantes).
“La leve diferencia entre la matrícula inicial (1.154.786) y los datos de estudiantes que tenemos hoy, es la exactitud que nos permite la plataforma, pues en este censo, elaborado a inicios de abril, podemos identificar cuánto ha variado la matrícula conforme los centros educativos adecuan sus planes”, afirmó Paula Villalta, viceministra de Planificación del MEP.
Además, según el ministerio, un 99% de los centros educativos reportó haber elaborado los planes de apertura de las instituciones y 74 centros (1%) aún se encuentran finiquitando estos.
Vacíos en la información
En su comunicado de este viernes, el ministerio evitó indicar las horas de lecciones presenciales que reciben los estudiantes a la semana, cuántos docentes se negaron a retornar a las aulas por tener factores de riesgo frente a la covid-19, o la cifra de padres que se negaron a enviar a sus hijos por miedo al contagio.
La falta de información ocurre a pesar de la existencia de la Dirección de Informática de Gestión, que tiene 138 funcionarios y maneja un presupuesto anual cercano a ¢3.300 millones. En total, el MEP tiene un presupuesto de ¢2,5 billones.
Esta situación preocupa a la Contraloría General de la República (CGR), como lo evidenció un informe de la División de Fiscalización dado a conocer este jueves.
El documento DFOE-IF-00002-2021 evaluó el diseño e implementación de la Estrategia Regresar.
Según esa auditoría, la ausencia de datos en el MEP “limita posteriores valoraciones sobre la eficiencia, eficacia y economía de la Estrategia que se implementa, por cuanto no se asocian a objetivos claros sobre la prestación del servicio educativo, afectando, además, la mejora continua, la transparencia y la rendición de cuentas respectivas”.
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Nota actualizada a las 10:10 p. m. con respuesta del MEP a una pregunta planteada la tarde de este viernes