El regreso a clases implica un esfuerzo económico para las familias. Además, la nueva rutina también podría sumar números al recibo eléctrico.
Por esa razón, el jefe de Distribución de Energía de Coopesantos, Claudio Ureña, recordó la importancia de hacer un uso eficiente de la electricidad, ahora que podrían aumentar las necesidades en tiempos de escuela. Racionalizar, dijo, es la clave para que los recursos no se desperdicien ni signifiquen un incremento en el recibo.
“El concepto de eficiencia energética hace referencia a la capacidad para obtener los mejores resultados en cualquier actividad empleando la menor cantidad posible de recursos energéticos. Nos permite reducir el consumo de cualquier tipo de energía, sin condicionar la calidad de vida y con ello los posibles impactos ambientales asociados”, comentó el ingeniero.
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Estos consejos le ayudarán a buscar esa eficiencia:
1. Apagar los electrodomésticos que no esté usando. No es necesario mantener la televisión encendida al mismo tiempo que la computadora si se está estudiando, por ejemplo.
2. Utilizar luz natural para estudiar siempre que sea posible y mantener las ventanas despejadas. Planear los horarios de estudio para hacer las tareas, evitando las horas de la noche. Si debe hacerlo cuando ya oscureció, utilizar bombillos led en lugar de incandescentes, pues el ahorro de energía puede ir de un 40% a un 60%.
3. Planificar los ciclos de lavado y plancha. Evite la práctica común de lavar a diario los uniformes pues eso implica usar la misma electricidad que usaría con la carga completa de la lavadora. Igualmente, agrupe la mayor cantidad de ropa para plancharla de una vez y no gastar más energía calentando el aparato por una o dos prendas.
4.Controlar los tiempos de ducha. La segunda acción que requiere más energía eléctrica es el calentamiento de agua. El experto asegura que utilizar la ducha solo por el tiempo que nos llevaría cantar nuestra canción favorita es suficiente para asearnos y ahorrar energía.
5. Utilizar la cocina eléctrica con moderación. Si prepara sus menús para varios días, y no varias veces al día, puede bajar a la mitad la cantidad de energía que le cuesta cocinar los alimentos.
Si debe cocinar cada noche, utilice el mismo disco de la cocina para todas las preparaciones y alterne las cocciones con el microondas para racionalizar el consumo eléctrico.