Sonia Marta Mora Escalante dejará en unos días la silla de directora del Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (Sinaes) para ocupar la de ministra de Educación. Para los próximos cuatro años procurará, dice, mejorar la calidad de la formación docente y alcanzar el 8% del PIB para el sector.
Usted ha sido rectora de la UNA y presidenta del Sinaes. ¿Qué de esas experiencias se trae ahora al Ministerio de Educación Pública?Siempre he asociado el asumir una función pública con un esfuerzo transformador, con generar saltos cualitativos en las instituciones en las que estoy y, por supuesto, con el trabajo en equipo. El espíritu transformador es algo que traigo. También la experiencia de trabajo en equipo y el diálogo con distintos sectores. Los logros nunca son individuales sino que son fruto de la colectividad y solo construyendo en grupo y aprovechando las destrezas de diferentes personas se pueden conseguir. Un elemento fundamental de esas experiencias es que he aprendido que cuando se está en la función pública se está en posición de servicio. No es un mérito, sino una forma de devolver al país lo mucho que ha invertido en una misma. Por eso creo en una gestión transparente y de rendición de cuentas.
¿Cuál es el tema que más urge atender en educación? Ha habido logros importantes en los últimos años, después de la crisis de los años 80. Ha habido esfuerzos y voluntad nacional por ir avanzando en diferentes temas clave y por eso siempre he señalado que creo profundamente en que tiene que haber una política de Estado en educación. Asumo el Ministerio con esa actitud de fortalecer los logros que se confirmen como tales y, por supuesto, generar procesos de cambio donde sea necesario.
Sin duda, el tema que urge es la calidad educativa. Eso lo asocio a los ambientes de aprendizaje, la capacitación y formación docente, y la infraestructura escolar. Por ejemplo, el tema de la conectividad, porque hoy es imposible lograr una formación de calidad sin una verdadera revolución pedagógica y eso supone muchos elementos; entre ellos está el uso innovador, intensivo y creativo de las TIC (tecnologías de información y comunicación).
El plato fuerte de esta administración fue la educación técnica. ¿Usted qué tiene en la mira? Queremos conocer el estado en el que se encuentra cada institución para afinar nuestro plan de trabajo. Hay un plan de gobierno que es muy claro, con líneas estratégicas muy claras que serán mi orientación. Sin embargo, estas hay que contrastarlas con esa evaluación institucional que nos ha pedido don Luis Guillermo Solís en los primeros de días de asumir el cargo.
No tengo la menor duda de que será central poner la educación al servicio del objetivo de revertir las desigualdades. El sistema educativo se convierte en una vía clave para el logro de la equidad. Este eje central va a traducirse en una serie de prioridades como avances en cobertura de secundaria, en cobertura de preescolar y, por supuesto, el tema de la oferta de calidad.
¿Se ha planteado metas específicas en cuanto a la ampliación de la cobertura de Educación Diversificada y Preescolar? El plan de gobierno tiene metas específicas. Nosotros asumimos esos compromisos, pero los vamos a redimensionar con la información que recabemos al tomar nuestro cargo y será fundamental para trazarnos metas ambiciosas, pero realizables y que vayan en la línea de las prioridades del plan de gobierno.
Se habla del 0,5% del producto interno bruto (PIB) para atender la educación de niños de 0 a 6 años, que es una meta muy importante. Está claro que una educación preescolar pertinente y de calidad genera mayores capacidades de éxito educativo. En secundaria, la meta es del 80% de escolarización en los próximos años.
”Creo que uno de los retos fundamentales de la nueva gestión en el MEP y el nuevo Gobierno será concretar la asignación del 8% del PIB, que es uno de los compromisos, no de manera inmediata, pero sí al 2015. Sin duda, tengo claro que uno de mis mayores desafíos será la asignación de esos recursos adicionales a las áreas prioritarias, sobre todo en busca de mayor equidad”. Es claro que el nuevo Gobierno tiene el reto de hacer esa asignación presupuestaria sostenible en el tiempo. Conociendo la situación fiscal del país es un desafío de grandes proporciones”.
¿Cuáles medidas tomará para garantizar que se cumpla con el 8% del PIB? El reto de asignar el 8% del PIB a educación es uno que tiene el nuevo equipo de Gobierno en conjunto.
Mi papel desde el MEP será el de persuadir con datos acerca de las bondades y los efectos de la inversión. Una segunda tarea es priorizar las metas para el uso de esos nuevos recursos. Sabemos que hay que avanzar más rápido en calidad y cobertura de educación preescolar, de educación diversificada, y escuelas de horario ampliado, pero también en infraestructura porque hay escuelas con edificaciones realmente ruinosas donde no se garantizan estándares mínimos de calidad .
¿Cuáles reformas le parecen las más acertadas de la gestión de Leonardo Garnier?
Creo que acometer las reformas a los planes de estudio fue un acierto y han ido en la dirección correcta. Destaco particularmente el logro del programa sobre Afectividad y Sexualidad Integral, que era un tema en el cual el país tenía un rezago muy importante.
”El atender aspectos de la vida de los estudiantes como la vida saludable y el reglamento de sodas escolares es un esfuerzo que vale la pena”.
¿Cuáles reformas cree necesarias estudiar de nuevo?
El llamado “arrastre” (de materias). El objetivo que busca me parece loable y positivo: atacar la deserción y asegurar la permanencia. Sin embargo, lo que he conocido en el recorrido que he hecho por instituciones educativas es que hay grandes preocupaciones entre los educadores. Creo que merece ser analizado con detenimiento.
”Hay estudios que se están generando en este momento, incluyendo uno de la Universidad de Costa Rica, que muy pronto se divulgará y al que le estoy poniendo la mayor atención.
”Otra gran preocupación que tengo es el porcentaje de interinazgo que afecta la calidad del proceso educativo. Genera gran angustia entre educadores y también una peligrosa tentación de tener una reserva de recursos que podrían servir de botín político Un Estado transparente como el que busca el nuevo gobierno de don Luis Guillermo Solís tiene que asumir este problema y buscarle soluciones. En el campo de la contratación, el MEP tiene que ser transparente y eficiente porque tiene que privar el bienestar de los educandos y los derechos de los educadores, que se contraten a los mejores y que no influyan factores extraacadémicos ”.
El tema de la calidad docente es de los que más preocupa. A partir de su experiencia en el Sinaes, ¿cuáles disposiciones considera factibles para procurar la calidad?
Esto está muy relacionado con nuestras últimas iniciativas y proyectos en el Sinaes. De hecho, anunciamos hace escasas semanas un nuevo programa llamado la Acreditación en sus Manos, que busca incentivar la acreditación de nuevas carreras, sobre todo en campos de educación y salud. El programa incluye financiamiento con fondos públicos de expertos internacionales para venir a asesorar en la evaluación de los planes. En segundo lugar, el plan prevé un soporte financiero: las carreras serán exoneradas del pago de la evaluación externa y de la revisión de los informes de evaluación.”Hay, además, un estímulo a la gestión de los procesos de autoevaluación. El próximo 30 de abril tenemos una sesión con todas las carreras de Educación. Será una de las últimas tareas que asuma en el Sinaes, que es promover una creciente acreditación de carreras de Educación. Esperamos poder cubrir, al menos, 30 carreras nuevas adicionales a las que ya se tenían anunciadas para el 2014 y siguen llegando carreras nuevas.
”Una decisión que tomamos en el Sinaes es generar un modelo de evaluación de universidades y no solo de los programas y carreras; este es un paso valioso. Significa evaluar una universidad en su conjunto, con sus planes de estudio, sus mecanismos de calidad, sus sistemas de formación, sus sistemas de rendición de cuentas, su planta docente, etc. Tengo la esperanza de que pueda convertirse en un proceso de aseguramiento de calidad más vigoroso”.
Estamos hablando de incentivos, pero no de una obligación. ¿Quedará en la buena voluntad de las universidades este tema?
Se ha hablado de la necesidad de un gran debate. En este periodo en el Sinaes hemos creído que mientras no existan incentivos más claros a las universidades, no hemos agotado todas las opciones de acreditación voluntaria. También estamos trabajando en una campaña de fortalecimiento de la cultura de calidad. Cuando esta cultura de calidad crece y los empleadores, estudiantes y las familias exigen más, esto se traduce en un esfuerzo de las instituciones por acreditar sus carreras y ya lo estamos viendo.
En otros países se exige que los docentes del sistema público sean de universidades privadas y que tengan una licencia, lo cual depende de requisitos y una constante actualización profesional. ¿Consideraría medidas así?
Veo la necesidad de actuar en diferentes frentes. Por un lado, mayores exigencias a las instituciones formadoras y, por otra parte, un ambiente de creciente exigencia de rendimiento en las instituciones educativas , tanto con la información sobre los estudiantes como con el seguimiento de la capacitación docente . En mi experiencia, cuando hay programas atractivos de actualización profesional y que se enmarcan en temas de alta prioridad para los docentes, hay un interés en asumir estas tareas. Para que se pudiera establecer una exigencia, tendríamos que haber concretado ofertas de capacitación integrales y de alta calidad y ese es todavía un tema pendiente”.
El tema del desarrollo profesional y capacitación de los funcionarios cobra más importancia en esta coyuntura. Sin embargo, hay muchos cuestionamientos sobre la efectividad del modelo en cascada que se aplica actualmente. ¿Vislumbra alguna alternativa que sea económicamente viable para un Ministerio tan grande?Es un enorme reto. Creo que hay salidas y hay que tener un espíritu de innovación muy amplio. Una estrategia es la priorización: claramente, hay áreas y zonas del país donde esta capacitación es más urgente que en otras y eso hay que tenerlo en cuenta.”Creo que otra innovación capital pasa por el uso de las TIC. Hay un mundo por descubrir que Costa Rica todavía no ha aprovechado. He conocido experiencias internacionales donde se generan procesos de capacitación de educadores con un grupo de ellos, pero de ahí se sacan lecciones y se utilizan los mecanismos de la virtualidad para replicar las lecciones aprendidas. Hay que mirar las experiencias internacionales”.El Estado de la Educación critica la ausencia de una verdadera gestión por resultados en el MEP. ¿Promoverá un sistema evaluativo a los docentes?Una cultura de evaluación por resultados solo es exitosa si se aplica a todos los sectores y niveles. El plan de gobierno habla claramente de la evaluación de los docentes, de manera que estos esfuerzos tienen que contemplar la evaluación de la gestión del propio MEP, de la institución, de los docentes, de los estudiantes. Creo que cuando en una institución se genera un espíritu de rendición de cuentas integral, es posible lograr avance significativo. La cultura de evaluación culmina con éxito cuando se aplica a todos los componentes del sistema, pero también creo en una evaluación no punitiva, sino que realmente permita el mejoramiento y la toma de decisiones. Esa ha sido mi larga experiencia y la reafirmado en el Sinaes.Esto podría significar un pleito mayúsculo con los gremios. ¿Está dispuesta a “comprarse” esa pelea?Yo sé que en el campo educativo hay gremios muy fuertes e importantes. El espíritu con el que llego al MEP es el del Gobierno que lidera don Luis Guillermo Solís: de diálogo, de intercambio permanente. La falta de ese diálogo ha paralizado a este país en áreas fundamentales y me parece que en el caso del nuevo gobierno ha habido una voluntad nacional expresada por los costarricenses de un cambio y eso solo pasa por una voluntad transparente de diálogo. Ese es el espíritu que yo he tenido y he trabajado con el sector sindical desde las universidades. Mi experiencia ha sido positiva. Por supuesto que la tarea de la ministra en estos casos será de asegurar que todas la partes sean escuchadas. Hay expectativas legítimas de todos los sectores, pero, en las decisiones, la ministra tendrá que tener en cuenta el interés superior del país.¿Ya se han barajado nombres para sus viceministros?Yo tengo ya algunas perspectivas y nombres. Recuerde que somos fruto de una segunda ronda y este Gobierno ha tenido muy poco tiempo para tomar esas decisiones. Tengo nombres de gente importante, de gente que puede jugar un papel clave. Lo que tengo claro es que se trata de armonizar para completar un equipo de trabajo con competencias o destrezas que yo no tengo para tener una visión más completa de la tarea. Que sean personas con una gran claridad del cambio que el país requiere.¿Cuándo los elegiría? ¿Ya se ha comunicado con ellos?Esperaría que esté listo a inicios de la semana del 5 de mayo. He tenido contacto inicial con algunos.