Escuchar¿Qué es la ofensiva antitabaco del Ministerio de Salud?
La realizamos desde hace algún tiempo y la hemos incrementado. Promovemos más espacios libres de humo en empresas e instituciones, y tratamos de controlar que las instituciones públicas acaten la Ley reguladora del fumado . Hicimos cuñas para las universidades y seguimos coordinando con centros comerciales.
¿Por qué el plenario legislativo ni siquiera tiene en lista el convenio marco antitabaco?
Pasó del lugar número 30 al 4 en la comisión. El presidente Abel Pacheco nos ayudó para que el proyecto se convoque en la Comisión de Internacionales.
¿Quiénes son los principales enemigos de ese convenio?
Debe de tener muchos enemigos, pero no los tengo identificados. Hay empresas que han comentado que se opondrán. ¿Grupos de diputados? Me imagino que sí habrá oposición.
¿Cómo debe ser la discusión que se dé en el plenario?
Debe ser una discusión muy técnica, con criterios científicos. Hablamos de cáncer y de otras enfermedades. Quienes se opongan deberán tener argumentos científi-cos. Más de 70.000 investigaciones dicen por qué el fumado es malo.
¿Por qué no se incorporan medidas para la protección de los no fumadores?
Nuestra ley tiene medidas severas, pero los costarricenses no exigimos nuestros derechos. La gente no se da cuenta del daño tan terrible que hace el cigarrillo. Inclusive, muchas acciones que el convenio plantea ya están en la ley de control de la publicidad.
¿Ha evaluado el Estado demandar a las tabacaleras? La CCSS dice que el tratamiento de enfermedades relacionadas con el tabaco cuesta ¢25.000 millones al año.
Una demanda de ese tipo tendría connotaciones muy importantes. El Ministerio de Salud, por no ser un ente ejecutor, apoyaría lo que haga la CCSS. Nosotros no tenemos acceso a pacientes o al seguimiento que los especialistas pueden dar (al caso de un fumador).
¿Hay miedo de enfrentarse a las tabacaleras?
Yo no le tengo ningún miedo; el Ministerio de Salud tampoco. Nosotros estaríamos cumpliendo con defender la salud de los costarricenses. Nadie me va a hacer echarme atrás sobre este asunto.
¿Aprueba el Ministerio de Salud que esas empresas patrocinen, con fondos provenientes de la venta de cigarros, actividades deportivas y hasta de salud pública para población joven?
¡No, para nada, y menos deportivas! El deporte tiene que estar totalmente libre del tabaco. El deporte solo puede traer beneficios a las personas y la salud, y no se puede mezclar con algo que es una adicción y que es dañino.
¿Alguna vez ha fumado?
¡Nunca!
¿Ha sido fumadora pasiva?
Sí, de manera importante porque he estado en círculos donde se fuma mucho, como los académicos. En la universidad es muy común tener que trabajar en ese tipo de ambientes.
