El Gobierno decretó ayer emergencia sanitaria luego de que se confirmaran los dos primeros casos de gripe porcina en el país.
La declaratoria permite a la Administración Arias agilizar la entrega de recursos para reforzar las acciones de prevención, vigilancia epidemiológica y atención en todo el territorio nacional.
También faculta a las autoridades sanitarias a emitir medidas más restrictivas para evitar que personas contagiadas por el virus transmitan la enfermedad al resto de la población.
El decreto fue firmado ayer, al finalizar la tarde, por el presidente Óscar Arias Sánchez y la ministra de Salud, María Luisa Ávila.
Pocos minutos antes del acto, el Ministerio de Salud confirmó el segundo caso de un costarricense infectado por la denominada fiebre porcina.
Se trata de un hombre que llegó de México el pasado fin de semana, y que fue atendido en el servicio de urgencias de un hospital privado de nuestra capital.
A esa hora, el país aún estaba digiriendo la noticia divulgada a las 11 a. m. de que una mujer de 21 años, vecina de San José, se convirtió en la primera tica contagiada por este nuevo virus.
Ella llegó con síntomas al país el sábado, procedente de México, donde se sospecha que 152 personas han muerto por gripe porcina y hay más de mil contagiadas.
La mujer estuvo internada en el Hospital Calderón Guardia durante 24 horas, y fue dada de alta el domingo.
Afortunadamente, ambas personas presentaron cuadros leves de gripe y ahora se encuentran fuera de peligro.
Muestras de sus tejidos fueron enviadas por las autoridades sanitarias locales a los Centros de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), para la confirmación final.
Más dureza. Con la declaratoria de emergencia nacional, las autoridades estarán facultadas para ordenar el aislamiento temporal de nuevos contagiados (lo que se conoce como cuarentena).
Además, las órdenes sanitarias que se giren servirán como comprobante de incapacidad en trabajos y centros de educación .
Los médicos del Ministerio de Salud, además, tendrán la posibilidad de girar incapacidades, lo cual, hasta ahora, solo era atribución de los doctores de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Recuento. Hasta ayer, al principio de la noche, la Comisión Nacional contra la Pandemia de Influenza registraba 35 personas sospechosas de contagio.
De esos casos, 21 fueron descartados, 12 todavía están en estudio de laboratorio y dos fueron confirmados ayer.
La ministra Ávila admitió que esperan atender a más infectados.
La Caja Costarricense de Seguro Social se alista para esto. Su Almacén General empezará a distribuir 3.000 tratamientos del antiviral oseltamivir para tratar a eventuales contagiados.