Yossy Mejía, un joven de 17 años, siempre consideró que las adolescentes que quedaban embarazadas “se lo ganaban por hacer cosas que no debían”.
Este vecino de Turrialba tenía un carácter explosivo y fácilmente reaccionaba con agresividad. Un día, estando en su colegio, fue invitado a asistir a un campamento de tres días para hablar de prevenir la violencia contra las mujeres. Luego de participar en la actividad, se dio cuenta de que, por su forma de pensar, realmente necesitaba esta capacitación. “Nos hablaron de los tipos de maltrato a las mujeres, del acoso callejero y la equidad de género, y de que toda mujer debe ser respetada, sin juzgarla ni encasillarla. Me enseñaron a controlar mi enojo y a manejar la frustración”, contó Mejía.
Este joven es uno de los 700 hombres que, desde agosto del 2014, ha sido capacitado el Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu), como parte del proyecto B.A.1 de prevención de la violencia contra las mujeres en Centroamérica.
La iniciativa surgió ante la preocupación por los altos índices de maltrato al género femenino. Es financiada por el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y contempló una línea de acción en los cantones prioritarios de cada país.
Según Alejandra Mora, presidenta del Inamu, se eligieron sitios que registraban mayor cantidad de denuncias de violencia contra las mujeres. Los cantones prioritarios fueron Alajuelita, Desamparados, Heredia, Puntarenas, Turrialba, Coto Brus, Santa Cruz, La Cruz, Upala y Limón.
“Integramos a otros actores sociales, como los hombres, en la lucha contra la violencia. En los distintos cantones se trabajó con grupos de hombres que acudieron voluntariamente a recibir las capacitaciones enfocadas en la teoría de género, violencia y el manejo de la frustración, entre otros”, detalló Mora.
La funcionaria añadió que también hubo participación de niños y de mujeres agredidas, mediante grupos de apoyo.
Para Mora, el miedo y la dependencia de las víctimas hacia el agresor hacen que no se rompa el ciclo de la violencia.
En Costa Rica, la mayor movilización de la Fuerza Pública se asocia con incidentes de violencia doméstica. Marlon Cubillo, subdirector de la Fuerza Pública, indicó que, por ejemplo, para el reciente partido de fútbol entre Costa Rica y Haití, estaban preparados para atender unos 30 casos de violencia durante el juego.
Grupo variopinto. Choferes de buses, estudiantes, profesores, médicos y hasta religiosos participaron en las capacitaciones del Inamu, en el tema de prevención .
Ruthman Moreira, coordinador de los procesos de masculinidad del proyecto B.A.1, dijo que la única condición para participar era ser hombre.
“Indagamos cómo los encargos patriarcales naturalizan ciertos comportamientos. Descubrimos dónde estaban esos mandatos y qué perjuicios ocasionaban. Hay un nivel de conciencia de que esos encargos patriarcales están obsoletos. Trabajamos en el manejo del enojo, los celos y cómo ejercer una paternidad más afectiva y cercana”, explicó Moreira.
De acuerdo con datos del Inamu, de las 20 mujeres asesinadas en el primer semestre de este año, 11 (el 55%) fueron víctimas de feminicidio. Con estas 11 muertes, este delito suma ya 119 casos en Costa Rica desde el 2011 hasta junio del 2015.