Autoridades judiciales investigan si el suministro equivocado de nitrógeno en vez de oxígeno causó la muerte a Manuel Emilio Clare Jiménez, suegro del mandatario Miguel Angel Rodríguez, quien falleció en la unidad de cuidados intensivos de la Clínica Bíblica, el 17 de diciembre del año anterior, cuando se recuperaba de una operación.
Según confirmó Bernal Aragón, presidente de esa clínica, ellos interpusieron la denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial y el Ministerio de Salud y descartó que ese centro médico tenga responsabilidad.
Anoche, mediante un boletín de prensa, el director médico de la clínica, Jorge Cortés Rodríguez, detalló que el problema surgió debido a la "contaminación" en la red principal de distribución de oxígeno, "motivada por el suministro de un cilindro con un contenido diferente al indicado, cuyo envasado no es de nuestra responsabilidad".
También Rogelio Pardo, ministro de Salud, confirmó el incidente anoche a Telenoticias y sostuvo que hay una relación "muy directa, muy clara", entre los problemas del suministro de oxígeno y la muerte del padre de la primera dama, Lorena Clare.
La investigación, aparentemente, incluye al menos a otras dos pacientes a las que también se les aplicó el mismo gas, utilizado en las cirugías como anéstesico pero en combinación con una buena cantidad de oxígeno.
Aunque trascendió que solo hay una empresa dedicada a proveer los cilindros en los hospitales, ni la clínica ni el OIJ quisieron señalar el nombre.
En enero de 1990, dos mujeres fallecieron en el hospital San Juan de Dios por una causa idéntica y el caso llegó a los Tribunales de Justicia en donde se acusó a tres empleados de ese centro de salud. Sin embargo, el caso terminó en un sobreseimiento para los imputados.
Sin dudas
Según conoció La Nación, el banco de oxígeno de la Clínica Bíblica utiliza cuatro cilindros gigantes conectados a un sistema central y que se turnan, según se agotan. En este caso, el cilindro con nitrógeno se conectó a la red de oxígeno y fue así como se suministró a los pacientes.
Al conocer la denuncia, el Ministerio de Salud revisó la responsabilidad de la clínica en el caso, y según el ministro Pardo, la descartaron por cuanto el tanque usado estaba rotulado como oxígeno. "El error fue que llenaron un tanque de oxígeno con nitrógeno y le ocasionó la muerte a una persona", dijo el Ministro.
Para Pardo, "no queda duda" de la relación directa entre la muerte de Clare y la confusión en el contenido del cilindro. "El señor venía recuperándose muy bien de la cirugía. La muerte de él se relacionó con los problemas que sufrieron los otros pacientes en sala de operaciones. No se hizo una autopsia, pero yo creo que la relación es muy directa, muy clara".
Anoche, Lineth Saborío, directora del OIJ, ratificó que la denuncia la presentó Gerardo Sánchez, administrador de la Bíblica el 22 de diciembre. Su dependencia decomisó los cilindros y en este momento se encuentran bajo análisis. Esperan un resultado para la otra semana.
Con esas pruebas -según Saborío-se establecerá si hubo nitrógeno en el tanque de oxígeno, o si hubo una mezcla y en qué proporción, con el fin de determinar la posible responsabilidad de la empresa envasadora, contra quien se planteó la denuncia.
Colaboraron Angela Ávalos, William Méndez e Irene Vizcaíno.