Cuatro grandes obras viales, que los usuarios llevan años o décadas esperando, vieron pasar el 2023 sin movimientos de tierra. La “nueva carretera a San Carlos” y la urgente ampliación de la vía a San Ramón, cierran el año con avance cero.
En tanto, la ruta 27, hacia Caldera, sigue igual de colapsada que hace 12 meses y el tramo Barranca - Limonal está varado, sin empresa y sin financiamiento.
De los nueve proyectos de mayor importancia que se ejecutan en este momento, solo dos estarían listos en la fecha prometida.
Este es el detalle del desarrollo que tuvieron dichas obras durante este 2023.
Túnel de La Galera
Este proyecto había sido adjudicado desde el Gobierno anterior, pero no había recibido la orden de inicio debido a recortes presupuestarios en el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y ajustes en los diseños.
Finalmente, los trabajos comenzaron en enero de este año y se tiene previsto que el nuevo túnel quede habilitado en las primeras semanas del 2024, según prometió el jerarca del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Luis Amador, el pasado 15 de diciembre.
El paso a desnivel, cuyo costo es de ¢2.020 millones, incluye un túnel de 60 metros en el cruce del servicentro La Galera, el cual permitirá transitar sin detenerse desde San Pedro hacia Tres Ríos, así como desde y hacia la vía a Cartago.
Hatillos
De los tres pasos a desnivel que deben construirse en los cruces semaforizados en los Hatillos, y que también están adjudicados desde hace dos años, este 2023 solo recibió orden de inicio el de Hatillo 4.
Esa obra, que arrancó en agosto anterior, tiene un plazo de ejecución de 18 meses y para diciembre el MOPT reportó un avance del 23%.
El proyecto incluye un viaducto de 6 carriles, que conectará con la conocida rotonda de Alajuelita y una rotonda a nivel para conectar con las calles de los barrios cercanos. El costo es ¢6.800 millones y está a cargo de MECO.
Aún quedarían por construirse los pasos en los cruces de los Hatillos 7 y 8 y en Hatillo 6, sobre estos no se han indicado las fechas de arranque.
Intersecciones de Taras y La Lima
Las dos intersecciones de tres y cuatro niveles comenzaron su construcción en enero del 2021 y su plazo de ejecución era de 28 meses, por lo que debieron haberse completado a mediados de este año.
Según la unidad ejecutora, el intercambio de Taras es el que presenta mayor avance con un 51% y se tiene previsto que este sea habilitado en el primer semestre del próximo año. El proyecto ha recibido prórrogas por más de 500 días.
En el caso de la intersección de La Lima, donde se construye un intercambio de cuatro niveles, el avance es del 30% y la promesa del Gobierno es que finalizaría antes de que termine el 2024.
Como parte de esos trabajos, el MOPT había prometido habilitar este diciembre el intercambio en la avenida 23 de Cartago, entre ambas intersecciones; sin embargo, el viernes 15 de diciembre, durante una actividad de atención a medios, el jerarca del MOPT, Luis Amador, dijo que la habilitación se daría en los “próximos días” y posteriormente la unidad ejecutora también evitó indicar una fecha a este medio, indicando que sería en las “próximas semanas”.
Los trabajos fueron encargados al consorcio H Solís-La Estrella por un monto de $58 millones.
V etapa de Circunvalación norte
La última etapa de la Circunvalación norte será habilitada en setiembre del 2024, según la más reciente promesa del Conavi.
Esta obra, que permitirá completar el anillo de Circunvalación, recibió orden de inicio en agosto del 2021 y tenía un plazo original de ejecución de 18 meses. El avance a diciembre era del 67%, según la unidad ejecutora.
El trayecto de 1,5 kilómetros incluye un viaducto (una carretera elevada) y un túnel, además de vías marginales debajo del viaducto y carreteras al nivel de la vía en el paso deprimido.
La obra fue encargada mediante una adenda al contrato que contempló las cuatro unidades funcionales entre la Uruca y la ruta 32 (puestas en servicio en junio anterior) y que se encargó al consorcio H Solís-La Estrella por un costo total de $223 millones.
Ruta 32
La ampliación de los 107 km de la ruta 32, entre el cruce hacia Río Frío y el centro de Limón tuvo durante el 2023 el ritmo de ejecución más bajo de los últimos años.
El proyecto, cierra el año con un 84,1%, según indicó el director del Conavi Mauricio Batalla a este diario.
Esa cifra es apenas 8% superior a lo que registraba la obra en enero.
En noviembre, el Conavi confirmó una nueva prórroga a la empresa China Harbour Engineering Company, que trasladó la fecha de entrega de los trabajos a diciembre del 2024.
Las obras contratadas a CHEC recibieron orden de inicio en noviembre de 2017 y debían estar listas en octubre del 2020.
El proyecto original incluía la ampliación a cuatro carriles de 107 km de carretera, así como la construcción de 33 nuevos puentes, 13 pasos a desnivel, 11 retornos, 24 puentes peatonales y cinco intersecciones; sin embargo, 11 de esos pasos e intercambios ahora serán rotondas.
El costo inicial se estimó en $534 millones, pero el MOPT y Conavi ya advirtieron que se requieren de al menos $150 millones más para completar las obras.
Adicionalmente, el MOPT negocia una extensión en el préstamo del Eximbank, el cual vence en abril próximo, lo que significa que para esa fecha si no se logra esa prórroga financiera, las obras que falten quedarían sin recursos.
San Carlos
Los sancarleños verán terminarse un año más sin que inicien las obras en la esperada carretera entre la carretera Bernardo Soto y La Abundancia de Ciudad Quesada.
Este año ni siquiera comenzaron los trabajos que debían ejecutarse en los 7 km de la vía La Abundancia-Sucre, una ruta que permitiría descongestionar el centro de Ciudad Quesada, debido a problemas con la constructora.
Sobre el proyecto principal que incluye completar el tramo central (Sifón-La Abundancia) y la punta sur entre La Bernardo Soto y Sifón, el jerarca del MOPT aseguró que la licitación se lanzaría en los primeros meses del 2024 y los trabajos en la punta sur iniciarán en octubre.
El presidente Rodrigo Chaves había prometido a los sancarleños que la ruta estaría finalizada antes de terminar su Gobierno.
No obstante, de acuerdo con los plazos actuales, el proyecto estaría terminado a finales del 2026.
Se estima que el proyecto costará $340 millones, unos $40 millones más de lo que se había estimado. Los recursos provienen de un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo, que se gestionó desde el Gobierno anterior y una parte de los fondos del proyecto Barranca-Limonal, que también eran financiados por ese banco.
San Ramón
Una situación aún más lejana enfrentan los pobladores de los cantones de Occidente, quienes deberán esperar al menos 6 años para ver terminada la ampliación de los 60 km de la ruta San José-San Ramón.
Luego de romper el Fideicomiso con el Banco de Costa Rica, cuyo proceso de transición se completaría al finalizar el 2024, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) prevé que las obras comiencen en el 2026, si se cumplen los plazos de consecución y aprobación del crédito, expropiaciones, licitación y adjudicación del proyecto, y serían entregadas a inicios del 2030.
Actualmente el Conavi espera los resultados de un estudio de optimización mediante el cual se pretende ajustar los diseños, costos y modelos de operación, planteados por el BCR en los estudios de factibilidad que fueron entregados desde finales del 2020.
Actualmente, lo único que la Administración tiene definido es el cronograma, que, además, tiene entre sus fases gestiones que no dependen del Gobierno.
Barranca-Limonal
Los trabajos para ampliar el tramo de 50 km de la Interamericana Norte entre Barranca y Limonal se encuentran suspendidos desde finales del 2022. La empresa H Solís-La Estrella pidió el finiquito del contrato, alegando problemas en diseños, expropiaciones y otros atribuidos a la Administración, mientras que el MOPT argumentaba abandono por parte de la constructora.
Al final ambas partes debieron acudir a un Centro de Resolución de Conflictos, pues la firma reclamaba el pago de $23 millones por la suspensión del contrato. El monto acordado tras ese proceso fue de $13 millones, que según el ministro Amador deben ser validados por el Banco que financiaba el proyecto.
El proyecto quedó con un 18% de avance tras haber consumido más de dos años del cronograma y unos $34 millones del presupuesto.
Ahora el MOPT gestiona un nuevo crédito, pues la obra costará unos $63 millones más de lo que inicialmente se había estimado y los fondos que quedaban del préstamo original se usarán en la vía a San Carlos, el pago a la empresa y obras de conservación en el mismo tramo.
Además, se debe realizar una nueva licitación.
Ruta 27
La urgente ampliación de la ruta 27 también está paralizada, luego de que durante el Gobierno anterior se avanzara en la negociación con la concesionaria y los diseños del proyecto.
Al inicio del actual Gobierno, tanto Chaves como Amador habían manifestado el interés de romper con la empresa y buscar otras vías para completar la ampliación.
No obstante, en agosto anterior la entonces secretaria técnica del Consejo Nacional de Concesiones, Dahianna Marín, afirmó que la opción de romper de forma anticipada había sido descartada debido al alto costo que representaba y a que representaría un atraso mayor.
En octubre, el jerarca de MOPT afirmó que solo la primera etapa del proyecto se ejecutaría durante este gobierno. Amador no detalló cuál será el plan que seguirá para desarrollar la obra, únicamente dijo que se mantienen en conversaciones con la empresa Ruta 27, al tiempo que el Ministerio de Hacienda busca recursos para financiar el proyecto, al menos en una primera etapa.