¿Cómo ampliar a cuatro carriles una carretera llena de guindos por un lado e inestables paredones al otro?
Si a la pregunta se suma que además se trata de un área protegida por ser parque nacional, la respuesta implica una tarea retadora.
Esa es una de las razones por las que el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) tiene sus esperanzas cifradas en un proyecto presentado por dos empresas mediante la figura conocida como iniciativa privada.
La idea es ampliar la calzada en los 45,8 kilómetros que comunican el puente sobre el río Virilla con el río Sucio. Para ello, se construiría un túnel paralelo al Zurquí, al menos dos viaductos y varios tramos de carretera en dos niveles.
También, se edificarían tres kilómetros de estructuras anti-deslizamientos y al menos 28 estructuras de contención.
La propuesta fue presentada por el consorcio H. Solís-TPF Ingeniería y aún está siendo analizada por el MOPT, pero incluso ese ministerio ya desistió de hacer su propio estudio de factibilidad para impular la futura ampliación.
En la iniciativa privada, un particular propone un proyecto de obra pública y, si el Estado lo acepta, se abre un concurso para contratar a un concesionario que la desarrolle y cobre el peaje para recuperar la inversión. El proponente puede concursar, pero no hay garantía de que se le adjudique. Si pierde, el concesionario le reconocerá el costo de los diseños y estudios previos.
“A raíz de la formalidad con la que se hizo la presentación, se suspendió el trámite que se tenía para la contratación del estudio de factibilidad, en el interín hemos constituido un equipo de muy alto nivel que ha venido estudiando lo concerniente a la propuesta.
“Creemos que de ser aprobado, caminaríamos por esa ruta que tiene la particularidad de concretarse en un lapso mucho más corto y que participa un grupo español que precisamente había hecho los estudios de la carretera a cuatro carriles desde San José a Limón hace 20 años, de manera que conocen la zona, tiene estudios previos y cuentan con una buena base”, aseguró jerarca del MOPT, Rodolfo Méndez Mata, la semana anterior.
Según dijo, el informe sobre la propuesta “está próximo a emitirse” y será conocido en el Consejo Nacional de Concesiones.
“Creo que es un estudio muy serio”, aseguró Méndez Mata, al tiempo que reconoció que, si se detuvo el estudio de factibilidad, es porque el MOPT tiene gran expectativa de esta propuesta.
De acuerdo con la información suministrada por el ingeniero Rodrigo Fernández, de la empresa H. Solís, los trabajos consisten en la ampliación del tramo que actualmente cuenta con un carril por sentido o en algunos sectores un 2+1 (carriles de ascenso) a una vía con dos carriles por sentido.
Lo que más llamó la atención del MOPT es que la empresa promete realizar la ampliación utilizando el espacio actual, por lo que no sería necesario desafectar el parque nacional o intervenir taludes.
Para esto, explicó Fernández, será necesaria la construcción de viaductos y algunos tramos de carretera de dos niveles.
En otros sectores incluso se harían puentes a un lado de la carretera actual.
El proyecto además incluye una serie de obras para contrarrestar los problemas de deslizamientos que constantemente afectan dicha carretera.
Para eso, la empresa pretende levantar túneles falsos, los cuales son una especie de cajones que protegerían los vehículos en caso de caída de material.
En otros tramos se prevé hacer una separación de carriles por sentido, con una plataforma que permita mantener la circulación en caso de que alguno de los carriles se vea afectado por deslizamientos.
Además, se incluyen la creación de muros de contención y sostenimiento de taludes.
Uno de los mayores retos que deberá afrontar la concesionaria, en caso de que el proyecto se apruebe, es la duplicación del túnel Zurquí.
Según el ingeniero, para esto se debe construir un viaducto de acceso al túnel.
“El primer concepto que se está haciendo es hacer uno a una distancia del túnel actual, hay que salirse y meterse en un cañón para mantener el paso”, explicó.
La empresa además debe construir un puente paralelo al del río Sucio y realizar las ampliaciones necesarias en el intercambio a la entrada de Guápiles.
Además, se incluye un centro de operaciones y mantenimiento vial, oficinas y, en alianza con el Estado, se ofrecería a los usuarios asistencia en caso de accidentes, rescate en carretera y servicio de monitoreo y patrullaje a lo largo de la ruta.
La inversión estimada por el consorcio para este proyecto es de $643 millones, que serían reintegrados en un período de explotación de 30 años.
La empresa no dio a conocer las tarifas estimadas de las tasas de peaje que se cobrarían en la ruta para recuperar dicha inversión.
La intención es que, una vez que el plan sea analizado por el CNC, la etapa de proposición en la que se desarrollarían los estudios de factibilidad tome 12 meses.
A estos se sumarían otros cinco meses de revisión, correcciones, elaboración y aprobación de las bases técnicas para la licitación pública.
De esta forma, la misma sería publicada a mediados del 2020.
Posteriormente, la empresa tendría 12 meses para la elaboración de los diseños y, de ahí en adelante, se tendrá la estimación del plazo de construcción.
Una de las intenciones del MOPT es que obras como la ampliación del puente sobre el río Virilla, conocido como del Saprissa, así como la obra que realiza la empresa China Harbour Engineering Company, en el tramo entre el cruce a Río Frío y la ciudad de Limón, sean considerados como un aporte estatal que permitiría aplicar tarifas de peaje “socialmente aceptables”.