Al tiempo que la época lluviosa comienza a instalarse en el país, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) se queda con los bolsillos vacíos para atender eventuales emergencias producto de los aguaceros y fenómenos naturales que caracterizan la estación.
La falta de saldo para estos eventos fue confirmada por la Gerencia de Conservación de Vías del Consejo ante consultas de este diario.
Según informaron, los “compromisos adquiridos” a lo largo del año pasado para la atención de emergencias consumieron los recursos que estaban asignados para este periodo, por lo que actualmente no hay fondos para atender nuevas situaciones.
Además, la unidad afirmó que tampoco tiene los fondos para atender las obligaciones derivadas de los contratos para la conservación periódica de rutas nacionales. El presupuesto que se asignó para este año, informó, está “muy por debajo” de los compromisos contractuales que se asumieron.
Eso significa que Conavi no posee los recursos para pagar las contrataciones ya adjudicadas para labores de rehabilitación de pavimentos, conservación de puentes y atención de sistemas de evacuación pluvial (cunetas y alcantarillas).
“Se han venido realizando gestiones para solicitar que se asignen los recursos mínimos para hacer frente a los compromisos ya adquiridos. De momento, se ejecutará la totalidad del presupuesto según las prioridades identificadas, a la espera de contar con la asignación presupuestaria correspondiente”, indicó.
La Gerencia de Conservación recordó que los recursos no ejecutados al concluir el año vuelven a la caja única del Estado. Luego, al inicio del siguiente año, el Ministerio de Hacienda vuelve a asignar fondos que no necesariamente cubren los compromisos adquiridos en el periodo anterior.
Presupuesto extraordinario
Diferentes dependencias del Conavi presentaron ante la Junta Directiva de ese consejo una propuesta de presupuesto extraordinario, la cual fue enviada al Ministerio de Hacienda.
Solo en el caso de la Gerencia de Conservación, se requieren ¢70.000 millones.
“Se estima que este monto se encuentra dentro del parámetro de lo que aún no ha sido asignado de este año y de periodos anteriores de lo correspondiente a la recaudación del impuesto establecido en la Ley No. 8114 (Ley de Simplificación y Eficiencia Tributaria), cuyo fin específico es la conservación vial, el mantenimiento rutinario, el mantenimiento periódico, el mejoramiento y la rehabilitación de la red vial cantonal”, añadió en la respuesta enviada.
LEA MÁS: 713 kilómetros de rutas nacionales requieren reconstrucción total
La semana anterior, La Nación consultó al ministro de Hacienda, Nogui Acosta, si existía algún presupuesto para Conservación pendiente de ser aprobado y aseguró no tener conocimiento de ninguna propuesta del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) en esa línea.
Difícil situación
Días antes, el ministro de esa cartera, Luis Amador, indicó en una conferencia de prensa que actualmente el Estado no cuenta con los recursos necesarios para llevar la red vial a una condición aceptable.
“Si usted mira lo que se ocupa en realidad, diay, no se puede hacer todo en un solo año para arreglar la totalidad de las carreteras. Entonces, lo que se hace generalmente es que se fracciona por periodos de planes de inversión anuales. Cada año, usted le va asignando”, dijo.
No obstante, Amador reconoció que no se tienen los recursos para poner la red en un estado “aceptable”.
“Es más, hay un punto de equilibrio, donde usted logra sostener lo que tiene en una condición aceptable y lo que está malo lo empieza a regresar a una condición buena; yo estoy casi seguro de que no estamos llegando a eso”, sostuvo.
LEA MÁS: Deterioro en calles: ‘Tenemos recursos limitados y no puedo tapar todos los huecos en un año’
De acuerdo con el detalle del Conavi, ya se adjudicaron todos los contratos de la llamada línea 7 que corresponde al “mantenimiento periódico y rehabilitación del pavimento”, en todas las zonas del país, a excepción de la correspondiente a Los Santos, Cartago y Turrialba, que debió ser sacada nuevamente a concurso, debido a procesos de apelación.
También fueron adjudicadas las labores de mantenimiento rutinario, contingencias, mantenimiento básico de puentes y conservación del sistema de evacuación pluvial de la red vial de todo el país.
Esos contratos representan un compromiso de ¢97.000 millones que se deberían invertir en los próximos dos años.
El presupuesto que se asignó este año al Conavi para las tareas de conservación fue de ¢53.000 millones, sin embargo, gran parte de esos recursos estaban comprometidos a pago de imprevisibilidades y otras contrataciones de emergencia realizadas durante la estación lluviosa del año pasado.
Las rutas nacionales estuvieron sin atención durante los últimos dos años, debido a que no se contaba con contratos de conservación, entre otras cosas, por el impacto de la investigación del llamado Caso Cochinilla, por supuesta corrupción con obras viales. Esa situación llevó a las carreteras a un grave deterioro.
LEA MÁS: Huecos y más huecos... carreteras retroceden 20 años por abandono
Recuperar la condición que tenían las vías antes del 2020, podría llevar al menos ocho años y requiere de una inversión de más de ¢235.000 millones, según cálculos del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme).