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La Contraloría General de la República (CGR) autorizó recursos para el reforzamiento y ampliación del puente viejo sobre el río Virilla en la ruta 32, conocido como puente del Saprissa.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) comunicó este viernes que la autorización ocurre tras la aprobación de una adenda al contrato del puente paralelo, habilitado en setiembre del año pasado.
De acuerdo con la entidad, el monto para esas obras será de $21,8 millones, aproximadamente, el equivalente a unos ¢13.700 millones, y forma parte de una ampliación al contrato original entre el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops).
El gerente de la Unidad Ejecutora Conavi-BCIE, Carlos Jiménez, explicó que las labores a ejecutar comprenden tanto el reforzamiento de la antigua estructura, como la construcción de un carril adicional, de una pasarela peatonal y de una barrera anti suicidio.
“Tendremos una intervención completa del puente, se refuerza desde sus cimentaciones, las columnas, vigas, se hace un tensado de dovelas, además de ampliar la losa superior pasar a tres carriles y tener de esta forma un puente similar al que recién terminamos. Esto nos permitirá tener el paso a tres carriles por sentido”, indicó.
Este proyecto es financiado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y las obras serán ejecutadas por el Consorcio Virilla 32, conformado por las empresas Puentes y Calzadas S. A., de origen español y Meco S. A., de capital costarricense.
Además, en un comunicado enviado este viernes, la CGR explicó que la modificación de recursos y de plazo se autoriza porque se identificaron “factores de riesgo relativos a la seguridad estructural y a la seguridad de las personas”.
También debido al “interés público expuesto respecto del ahorro en plazos, costos, impacto ambiental, así como respecto de la seguridad para las personas”.
La obra debe estar terminada 12 meses después de la orden de inicio.
Arreglo más caro
El costo de reparar el puente viejo del Saprissa se encareció por el tiempo que transcurrió entre la solicitud de adenda al contrato con el consorcio de las constructoras Meco y Puentes y Calzadas y su respectiva aprobación.
La intención era que se aprovecharan las obras de acondicionamiento y acceso que las empresas realizaron en el sitio para la construcción de la nueva estructura, en las labores de mejora del viejo paso. De esta forma, se abarataría.
El ahorro se estimó en unos $3 millones, según informó el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) el año pasado.
No obstante, como no habían logrado la autorización de la adenda, la empresa estuvo retirando maquinaria y desmantelando las instalaciones y obras que realizó en el sitio, lo que provocó un aumento en el costo.
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