Al menos 10 deslizamientos de tierra “muy grandes” y otros 20 medianos amenazan a los conductores sobre un tramo de 25 kilómetros de la ruta nacional 32, que une San José con Limón, informó este viernes la Asociación Costarricense de Geotecnia (ACG).
Este tramo va del túnel Zurquí al río Sucio y está clasificado como la sección de mayor vulnerabilidad por deslizamientos (movimientos de terreno) o derrumbes (caídas de material), conforme un diagnóstico preliminar que presentó el ingeniero Sergio Sáenz, en el II Seminario de Reparación y Restauración de Taludes y de Carreteras de Montaña, realizado el jueves.
El especialista indicó que la vía carece de obras complementarias como manejo de aguas en las coronas de los taludes, drenajes superficiales y subterráneos, estudios geológico-geotécnicos del corredor vial, obras de retención y reforzamiento de taludes. Todo ello agudiza la exposición de los usuarios a una tragedia.
LEA MÁS: 14 kilómetros de montaña en ruta 32 son un peligro constante para producción del país
“Hemos llegado a un punto sumamente crítico en relación con esta carretera. Es urgente tomar cartas en el asunto porque vivimos en un país muy lluvioso y si no se toman las medidas del caso, vamos a seguir sufriendo con los cierres de la vía, con el impacto tan negativo que eso genera en el transporte de las personas y los productos de exportación hacia el puerto de Limón”, enfatizó Sáenz.
Un derrumbe en junio provocó el cierre por 19 días.
Estudios del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) había contabilizado 182 desde el 2014 a la fecha y señaló que 78 se concentraron en 14 km del paso de montaña.
Esos 182 derrumbes han implicado igual número de cierres de esta carretera, por la cual se movilizan entre 20.000 y 24.000 furgones por mes que transportan la mayor parte de las importaciones del país y el 88% de sus exportaciones. Desviarse por la vía alterna (por Turrialba) encarece hasta en ¢40.000 cada viaje de un furgón hasta los puertos de Limón o viceversa, por mayor consumo de diésel, de acuerdo con los transportistas.
Adecuar leyes
La Asociación advierte de la necesidad de adecuar el marco legal nacional con el fin de permitir las obras complementarias debido a que la sección a intervenir se encuentra dentro de un parque nacional: para realizar cortes o terraceo en los taludes es necesaria una autorización del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae). Además, está el tema del costo.
LEA MÁS: Sufrimiento por cierres de ruta 32 continuará a falta de soluciones
Las soluciones al problema se discuten desde hace más de 12 años y han incluido la construcción de túneles falsos que consisten en una especie de cajones metálicos en puntos propensos a derrumbes que recibirían el material en caso de una caída de este y con ello proteger los vehículos.
Sin embargo, el ministro de Obras Públicas y Transportes, Luis Amador, ha dicho que este tipo de soluciones cuestan unos $160 millones y el Estado “no tiene de dónde”.